ofensiva. Según lo acordado con las autoridades francesas en la Conferencia de Dakar de septiembre de 1957, el 24 de enero de 1958 se reunieron las autoridades españolas y francesas en Dakar donde se presentó un primer plan de lo que sería la operación que los españoles denominaron «Teide» y los franceses «Ecouvillon». Este plan de actuaciones conjunto y combinado se dividía en una fase previa a cargo de las fuerzas aéreas hispano-galas mediante el bombardeo de varias zonas en el Sáhara, en especial Edchera y Tafudart, y tres fases operativas terrestres17. En la primera fase de combate, que debía durar diez días, se atacaría a las bandas del Ejército de Liberación en las zonas de Edchera y Tafudart, ocupando también Smara mediante una acción convergente de fuerzas españolas procedentes de El Aaiún que se desplazarían por el norte de la Saguía Al Hamra y de fuerzas francesas procedentes de Fort Trinquet. En una segunda fase de explotación se procedería a la limpieza y destrucción de estas fuerzas hasta el meridiano 12.º Este, donde se convergería con los franceses. Al mismo tiempo, en la Región Sur se procedería a la limpieza de la zona mediante dos acciones simultaneas; una francesa desde Fort Trinquet en dirección a Bir Enzaran, donde convergerían con los españoles que actuarían en persecución sur desde la Saguía y con las fuerzas que desde Villa Cisneros confluirían sobre esta población. Finalmente, los restos del Ejército de Liberación que tratasen de replegarse sobre Operacion TEIDE Auserd más al sur se encontrarían con la acción convergente 34 / Revista Ejército nº 932 • Extraordinario noviembre 2018 de dos fuerzas francesas procedentes de Fort Gourad y Fort Etienne, y de otra fuerza española procedente de Villa Cisneros con la misión de destruir el resto de partidas rebeldes. El tiempo previsto era de diez a quince días para ejecutar toda la operación, siendo el meridiano 12.º Este la línea de coordinación entre españoles y franceses. Los españoles calculaban que los rebeldes en el Sáhara sumaban unos 7 000 efectivos, mientras que los franceses reducían este número a la mitad. Para este plan las fuerzas españolas contaban en su fase inicial con una poderosa masa de maniobra compuesta de cinco batallones de infantería, dos grupos de caballería y un grupo de artillería, con no menos de 6 000 soldados, frente a un enemigo que no debía superar los 1 000 efectivos pero que se encontraba perfectamente adaptado al terreno y que, hasta entonces, había mantenido la iniciativa. Operativamente, las fuerzas españolas para la operación Teide quedaron organizadas en tres agrupaciones tácticas: Agrupación Táctica A, con base en El Aaiún, 1 507 hombres y 262 vehículos, dividida en dos subagrupaciones y una fuerza de reserva; Agrupación Táctica B, con base en Villa Bens, 1 522 hombres y 269 vehículos; y Agrupación Táctica C, con base en Villa Cisneros, con previsión de actuación en la segunda fase. Por su parte, la fuerza
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