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Revista-General-Marina-275-1-julio-2018

TEMAS GENERALES menciona a Cuniberti en sus memorias, quizás porque su orgullo no le permitía reconocer en público que su proyecto de all-big-gun ship había sido la idea de un italiano, pero el artículo tuvo que haberlo leído forzosamente, ya que se hizo famoso en las principales marinas de la época. Fisher quería, en primer lugar, que el Dreadnought fuese capaz de dar 21 nudos, una velocidad que era imposible alcanzar con las máquinas alternativas de vapor. La solución, por tanto, estaba en equipar al buque con turbinas. Dos destructores, el Viper y el Cobra, cuya construcción finalizó en 1905, habían sido dotados de turbinas y eran capaces de alcanzar los 36 nudos. El siguiente paso era la coraza: el buque tenía que ser capaz de aguantar los impactos del enemigo, por lo que se protegió con 5.000 t de acero. En cuanto al armamento, se le montarían 10 cañones de 12 pulgadas en cinco torres. El HMS Dreadnought fue entregado a la Royal Navy el 11 de diciembre de 1906, marcando un antes y un después en la construcción naval, de tal manera que todos los acorazados construidos a partir de entonces recibieron el nombre genérico de dreadnoughts y los anteriores pasaron a llamarse predreadnoughts. El all-big-gun ship, si bien había sido un éxito como buque de guerra, planteó un grave problema a Gran Bretaña; al dejar obsoletos todos los navíos anteriores, anulaba la gran ventaja numérica en barcos que poseía la Royal Navy, dando a Alemania una oportunidad de comenzar una carrera naval con Inglaterra en igualdad de condiciones. A la carrera naval entre acorazados siguió otra entre cruceros. Fisher quería unos buques que fuesen capaces de dar 25 nudos manteniendo los cañones de 12 pulgadas. Para conseguir estos cuatro nudos extras de velocidad había que sacrificar algo, y ese algo era la coraza y una torre doble de 12 pulgadas. Basado en la falsa idea de que speed is armour, surgió lo que vino a llamarse cruceros de batalla (battle cruisers), de los que la clase Invincible, compuesta por este buque y el Inflexible, Indomitable e Indefatigable, fue su primer exponente. Cuando la información sobre estos buques llegó a Alemania, Tirpitz dio la orden de construir el Blücher, y posteriormente los Moltke, Goeben, Seydlitz, Derfflinger y Lützow. La respuesta británica al Moltke y sus hermanos fue la serie de los four Cats: Lion, Princess Royal, Queen Mary y Tiger. Si bien los calibres, la velocidad y los desplazamientos fueron aumentando en ambos bandos conforme se iban construyendo los distintos buques de cada serie, la regla general era que los británicos poseían mayores calibres y daban más velocidad, pero tenían muy poca coraza. Los germanos en cambio disponían de una mejor protección y una excelente compartimentación estanca. Estas diferencias fueron críticas y resultaron favorables a los alemanes, como se demostró en Jutlandia, donde el Indefatigable, el Queen Mary y el Invincible, volaron por los aires cuando fueron alcanzados por el fuego de los cruceros del contralmirante Hipper. 22 Julio


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