Mando y Control de la OTAN. El lanzamiento de cualquier misil balístico que se identifique con un posible ataque con misiles procedentes de Siria es alertado, de manera instantánea por el sistema de sensores y satélites a disposición de la Alianza, calculando su posible trayectoria y el previsible punto de impacto. De manera simultánea, y en función del punto previsto de impacto, la unidad Patriot recibe la orden del Centro de Operaciones de la Defensa contra Misiles Balísticos, integrado en el Mando Aéreo de Ramstein, de prepararse para combatir la amenaza. A continuación, los operadores del sistema dan la orden de abandonar el modo pasivo para pasar inmediatamente al modo activo, con lo que el radar está activado para identificar el misil o los misiles, engancharlos y, en el caso de que amenazasen la ciudad de Adana, neutralizarlos. —¿Y todo esto, en cuánto tiempo? —La respuesta es prácticamente inmediata. En apenas unos segundos los operadores de nuestra batería Patriot pueden tener al objetivo en seguimiento. Un misil balístico estándar, de los que el régimen sirio tiene almacenados en su arsenal, con un alcance de entre 50 y 80 kilómetros, tarda de tres a cinco minutos en alcanzar su objetivo, por lo que el combate antimisil requiere una preparación permanente y una respuesta inmediata, en tiempo real. —¿Cómo repercute esta operación en la seguridad de los españoles? —Hoy en día, la amenaza terrorista es global y la seguridad de España va más allá de sus fronteras, empezando en aquellos países donde se genera inestabilidad. La seguridad en el mundo, por lo tanto, repercute en la nuestra. La presencia de la unidad Patriot en territorio de Turquía, país aliado con gran importancia geopolítica y fronterizo a una zona inestable de Oriente Próximo, proyecta, en los diferentes contingentes con los que compartimos base aérea, la percepción de que somos un socio activo, comprometido y fiable con las iniciativas de la Alianza Atlántica. Con nuestro trabajo diario en Incirlik estamos demostrando a nuestros aliados ese compromiso. Defendiendo a la OTAN, también estamos defendiendo a España. Sobre este fundamento de seguridad y defensa se asienta el progreso estable y el desarrollo en paz de nuestra sociedad y de los principios que la rigen. misiones internacionales Un grupo de oficiales turcos que realizan el curso de Estado Mayor reciben una clase práctica sobre el funcionamiento de la unidad Patriot española. tales como misiles balísticos tácticos (TBM), objetivos de pequeña sección radar como drones, misiles de crucero (CM) y objetivos convencionales (aviones y helicópteros) bajo un ambiente de contramedidas electrónicas. El sistema se actualiza y mejora permanentemente con sucesivas versiones, que se denominan PAC (Patriot Advance Capability). Aunque inicialmente era un sistema únicamente antiaéreo, en 1988 se mejoró para proporcionar una limitada capacidad antimisil, en lo que se denominó versión PAC-1. El PAC-2 mejora, sobre la versión inicial, tanto el software como la capacidad de explosión del misil cerca del objetivo. Cada lanzador Patriot PAC-2 puede llevar y disparar cuatro misiles. Esta es la versión que ha comprado España. El nuevo material llegó a territorio nacional procedente de Alemania en julio de 2015 y en los tres meses siguientes el personal del Regimiento de Artillería Antiaérea nº 81 fue formado en el manejo y operación del nuevo sistema de armas con el apoyo de oficiales y suboficiales experimentados en su manejo procedentes del Regimiento de Artillería Antiaérea nº 74, con base en San Roque. Además, varios militares de esta unidad fueron destinados a Marines con lo que esa experiencia en el sistema Patriot se ha ido transmitiendo de una unidad a otra. Finalmente, el personal que iba a formar el tercer contingente se sometió a un periodo de adiestramiento operativo específicamente orientado a la misión. La adaptación al nuevo sistema ha resultado «relativamente sencilla», asegura el teniente coronel Juan Carlos Pérez Herrero quien, desde enero, ha estado al frente del primer contingente del RAAA 81 enviado a Turquía. «Hay que tener en cuenta —añade— que antes de ser dotado con el sistema Patriot, el regimiento de Marines contaba ya con un grupo de misiles Sam Roland, y con un grupo de cañones con sistema de dirección de tiro Skyguard, por lo que su personal ya estaba adiestrado en la táctica del combate antiaéreo». NUEVO CONTINGENTE Cumplida la misión y mientras los miembros de la tercera unidad Patriot se preparaban para regresar a territorio nacional, los integrantes de la cuarta rotación eran despedidos por sus compañeros y familiares con un acto celebrado el 17 de junio en la base General Almirante de Marines. Estuvo presidido por el jefe del Mando de Artillería Antiaérea, general José Miguel de los Santos Granados, quien hizo entrega al nuevo jefe del destacamento, el teniente coronel Luis Pardo, de una Bandera de Mochila de la Agrupación. Víctor Hernández Julio/Agosto 2016 Revista Española de Defensa 29 EMAD
REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA 330
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