La ministra de Defensa trasladó al Monarca «el agradecimiento, respeto y profundo afecto del estamento militar a su Jefe Supremo». este año «nos traiga esa paz por la que vosotros veláis en silencio», y envió un recuerdo y saludo especial «para tantos compañeros que se encuentran desplegados lejos de sus hogares y con la añoranza de la Patria», deseo que hizo extensivo a sus familias «que, sin escatimar esfuerzos y con sus sacrificios y aliento, hacen posible vuestros éxitos profesionales». Tras recordar a los caídos en acto de servicio, el rey afirmó que «su entrega noble, generosa, y a veces heroica, deberá ser siempre valorada y recordada con honra, con gratitud y con emoción. A sus familias, hoy de manera especial, les dedicamos todo nuestro cariño». Don Felipe manifestó la necesidad de seguir apostando por la modernización, «porque no podemos dejarnos rebasar por los nuevos escenarios y los desafíos actuales, cada vez más cambiantes e imprevisibles». A continuación, recordó que «España se ha consolidado como una referencia en el seno de la Alianza Atlántica» y mencionó las diferentes fuerzas y ejercicios aliados que España ha liderado a lo largo de 2016. «Todo esto —apuntó— ha sido posible gracias a la transformación llevada a cabo durante los últimos años, que responde a la necesidad de contar con unas Fuerzas Armadas capaces de asumir la gran variedad de funciones que tienen encomendadas». Al hacer referencia al terrorismo, el Rey señaló que «son muchas las naciones cuyas sociedades sufren con frecuencia su vileza y ensañamiento. En todas ellas pensamos y a todas ellas acompañamos en su dolor». «Tenemos la obligación —añadió— de hacer cuanto esté en nuestras manos por defender los derechos y garantías individuales de nuestros conciudadanos, así como de contribuir al esfuerzo internacional de lucha contra eta amenaza global común». Antes de concluir, Don Felipe recordó a los presentes que, en 2016, se conmemoró el cuarto centenario de la muerte de Miguel de Cervantes, y citó las palabras del «poeta-soldado» en su Discurso de las Armas y las Letras: «Las armas tienen por objeto y fin la paz, que es el mayor bien que los hombres pueden desear en esta vida». El Rey animó a los miembros de las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil «a seguir trabajando desinteresadamente por los demás, fortaleciendo los vínculos que no unen; con la Reina, os agradezco a todos vuestro compromiso firme en el servicio a España y a nuestros compatriotas». El Monarca cerró su discurso con un «¡Viva España!». El vino español que los Reyes compartieron en el Salón de Columnas con los asistentes puso fin a los actos de la Pascua Militar. Víctor Hernández Fotos: Pepe Díaz y Casa Real Enero 2017 Revista Española de Defensa 11
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