misiones internacionales El personal y los vehículos del contingente Letonia I formados en la base de la Brigada Extremadura XI, en Bótoa (Badajoz). La utilización, a 3.600 kilómetros de distancia de nuestro territorio, de medios pesados como los Leopardo y los Pizarro, implica un aumento de las tareas logísticas. Por este motivo, el 30 por 100 del personal del contingente es logista, procedente en su mayoría de la AALOG 61, y se dedicará en el país báltico a actividades de abastecimiento, mantenimiento y transporte. Las bajas temperaturas, de hasta 30 grados bajo cero, son una amenaza, por lo cual los militares españoles irán dotados de equipos contra el frío, y los vehículos con equipos y carburantes especiales. Por ello, la fase de preparación del contingente incluyó cursos y ejercicios para adaptarse a unas condiciones climatológicas extremas y a una geografía más compartimentada, con numerosos cursos de agua. POLICÍA AÉREA Y PRESENCIA NAVAL Los F-18 españoles con base en Amari (Estonia) efectuaron el pasado 16 de mayo su primer scramble (alerta de reacción rápida) real, al interceptar en aguas internacionales un Sukhoi SU-24 Fencer ruso, bombardero supersónico de los años 70. Dos de los cazas de nuestro país lo identificaron y escoltaron hasta que recibieron la orden de romper la formación. Se trataba de un avión procedente de Kaliningrado, no identificado y sin ningún tipo de comunicación con las agencias aéreas de control, que volaba cerca de la línea que marca las aguas territoriales de Letonia, en dirección a Estonia. En la base de Amari, cinco cazas del Ala 15 de Zaragoza, ocho pilotos y unos 75 especialistas, entre armeros y mecánicos, desarrollan, hasta el próximo EMAD Ejército de Tierra 31 de agosto, la misión aliada de la Policía Aérea del Báltico; más al sur, en la ciudad de Siauliai (Lituania), la OTAN tiene desplegado otro destacamento similar, dotado con cuatro F-16 polacos. Esta operación, en la que participaron en 2015 el Ala 11 de Morón desde Amari y en 2016 el Ala 14 de Albacete desde Siauliai, trata de cubrir las limitaciones en defensa aérea de los países bálticos, que no cuentan con aviación de combate . Asimismo, hasta el 5 de mayo la fragata Reina Sofía ha permanecido desplegada como parte de la Agrupación Naval Permanente de la OTAN número 1 (SNMG-1), una fuerza de reacción rápida que supone una fórmula más de disuasión de los aliados en la zona del Atlántico Norte y del Báltico. Santiago F. del Vado Los F-18 españoles se integraron en la misión de policía aérea el pasado 4 de mayo. Arriba, puesta a punto de una de las aeronaves. Pepe Díaz 20 Revista Española de Defensa Junio 2017
REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA 340
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