a la operatividad y sostenimiento de las unidades, en el 12,3 por 100; transferencias corrientes —a organismos autónomos del Ministerio, organizaciones internacionales, Centros Universitarios de la Defensa (CUD) para la formación de oficiales y comunidades autónomas para la de suboficiales—, en el 2,3 por 100; transferencias de capital —al INTA y a los CUD—, en el 0,1 por 100; e inversiones reales, en el 29’8 por 100. Se mantiene la dotación para activos financieros, con los que se abonan los anticipos de paga solicitados por el personal que reglamentariamente tiene derecho a ello. Al analizar el capítulo de inversiones reales —armamento y material, infraestructura, I+D y sistemas de información y telecomunicaciones—, el secretario de Estado de Defensa destacó la consolidación de la Lista Única Integrada puesta en marcha en 2017, que permite atender las necesidades de los Ejércitos de forma priorizada; y el hecho de que en los programas especiales de armamento, además de los 1.824,48 millones de euros que se utilizarán en pagar las cantidades pendientes —cifra idéntica a la del anterior Presupuesto—, se asignan otros 340 millones para reintegrar al Tesoro Público los anticipos recibidos. «Las inversiones de la industria de defensa —observó Conde— superan el ámbito del Ministerio por las implicaciones que conllevan, no solo militares sino también industriales, de empleo y de cohesión regional. Estamos hablando de una facturación por encima de los 5.000 millones de euros, con más del 80 por 100 de la producción dedicada a la exportación, y que mantiene 22.000 empleos directos; si añadimos los indirectos y los inducidos, son unos 110.000 empleos. Además, de cada euro que se invierte en defensa revierten 2,5 a la economía». Agustín Conde aclaró que en la Sección 14 (Defensa) de los Presupuestos se fija, por primera vez, la dotación para cubrir una parte de los gastos que genera la intervención de las Fuerzas Armadas en misiones internacionales, 300 millones de euros sobre un total estimado en 1.114,3 millones; hasta ahora, estos gastos se financiaban casi por completo mediante un crédito ampliable con cargo a la Sección 35 (Fondo de Contingencia). «Es un primer paso muy importante —puntualizó Conde—, que Las Fuerzas Armadas contarán el próximo año con un 6,4 por 100 más para mantener y mejorar sus capacidades operativas. marca el camino a seguir, iniciado por el Tribunal de Cuentas con su recomendación a la Secretaría de Estado. Es lógico que los créditos de estas operaciones sean ampliables, pero también es cierto que parte de los gastos en los que se va a incurrir puedan ser determinados con cierta precisión con carácter previo». Si se tiene en cuenta la previsión de coste de las misiones en el exterior, el importe total del gasto en defensa para 2018 es de 9.255,9 millones —incluidos los citados 1.114,3 millones—, frente a los 8.701 millones de 2017, de los cuales 1.076,8 millones fueron para esas misiones. Ello supone un aumento de 554,9 millones, el 6,4 por 100. La industria de defensa factura 5.000 millones de euros al año y mantiene 22.000 empleos directos Aunque reconoció que las operaciones en el exterior son «costosas», el secretario de Estado resaltó el valor de «salvar de la muerte a inmigrantes, permitir que nuestros pesqueros faenen seguros en el Índico, apoyar el proceso de paz en Colombia, ser solidarios con nuestros aliados turcos o bálticos contribuyendo a su seguridad, contener la expansión del fundamentalismo islamista en el Sahel o ayudar a que iraquíes y afganos combatan al terrorismo en sus territorios». Éstas son, añadió, «algunas de las misiones que desempeñan nuestras Fuerzas Armadas y que permiten a España figurar en el reducido grupo de países que exportan seguridad y estabilidad ». «El Proyecto de Ley —concluyó Conde— es mejor que el del año pasado, en técnica presupuestaria y capacidad de gasto, pero no es suficiente. Desde 2008 el Presupuesto de Defensa ha ido reduciéndose en cantidades inasumibles, alcanzando en su peor momento una disminución del 40 por 100, y no ha habido departamento ministerial que haya sufrido recortes de tal magnitud. El Gobierno ha ido aumentando poco a poco las cifras del Presupuesto, de manera que en este ejercicio recuperamos Mayo 2018 Revista Española de Defensa 23 Pepe Díaz
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