• La doctrina y el entrenamiento conjuntos maximizaron la contribución de la Fuerza Aérea a la batalla terrestre. La ejecución integrada de misiones se vio muy potenciada por los cambios doctrinales y el entrenamiento conjunto. • La fusión de la información, proveniente de medios ISR (como JSTAR), en el proceso de targeting de precisión permitió ataques verdaderamente todo tiempo, demostrando la importancia crítica del Dominio de la Información. El material utilizado ya existía anteriormente; lo que marcó la diferencia fue lo bien integradas que estaban todas las capacidades disponibles, demostrando que es el desarrollo de los conceptos operativos (los que satisfacen los resultados y efectos deseados) lo que debe impulsar la adquisición y desarrollo de la tecnología, no a la inversa. - Esta operación ratificó el concepto EBO, demostrando que el bombardeo estratégico de objetivos de liderazgo y de instalaciones clave es una tarea a medida para la fuerza aérea, especial Poder Aeroespacial 593 con su alcance y precisión. El poder aeroespacial es, sin duda, lo suficientemente flexible para producir los efectos deseados; sin embargo, fue la integración de todas las capacidades de todos los actores lo que consiguió una gran eficacia, demostrando la necesidad de luchar contra el adversario como una sola fuerza, centralizada en red, interoperable e integrada. - Esta operación intentó asimismo romper la resistencia del enemigo sin luchar en dos niveles diferentes. A nivel estratégico, centrándose en la estructura de liderazgo como piedra angular (en particular, en Saddam) e incitando a la población a rebelarse contra el régimen mediante la destrucción de símbolos de autoridad (como los palacios de Saddam), operaciones de seguridad, servicios de inteligencia y otros. Y a nivel operacional, mediante un esfuerzo relativamente alto en las Operaciones Psicológicas (se lanzaron 32 millones de folletos y se transmitieron 610 horas de TV y Radio). A pesar de lo mencionado, como en otros conflictos, las lecciones identificadas o aprendidas en esta operación deben tomarse en su contexto. Sin las potencias occidentales involucradas, probablemente los resultados hubieran sido diferentes. OPERACIÓN UNIFIED PROTECTOR Como parte de la serie de revueltas árabes populistas y, a menudo, revoluciones fundamentalistas de la Primavera Árabe de 2011, la OTAN intervino en la guerra civil de Libia con la Operación Unified Protector, utilizando únicamente el instrumento o poder aeroespacial para proteger a la población y, de facto, acabar apoyando sobre el terreno a las fuerzas locales de oposición. La intervención ayudó a derrocar al régimen de Gaddafi sin requerir el despliegue de fuerzas terrestres aliadas, con niveles muy bajos de daños colaterales y sin víctimas aliadas. Así mismo, el efecto acumulativo de desgaste, realizado por parte del instrumento aeroespacial de precisión, permitió una victoria rebelde sobre el terreno. En cuanto a los logros de la campaña aérea realizada en esta operación, podemos señalar lo siguiente: - Posiblemente el logro más importante fue permitir a la oposición libia centrada en Bengasi sobrevivir a la ofensiva de Gadafi (MAR2011). Sin la intervención aliada, las fuerzas del régimen habrían logrado romper y, potencialmente, aplastar el levantamiento contra Gadafi y en Libia habría muerto, presumiblemente, la Primavera Árabe. Los ataques aéreos iniciales frenaron, en última instancia, el ataque del régimen a Bengasi. - Permitió el giro de la guerra civil libia, posibilitando no solo la supervivencia de los rebeldes, sino el desarrollo con éxito de la ofensiva opositora para derrotar a las fuerzas de
RAA_885
To see the actual publication please follow the link above