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Revista del IEEE 6

183 Pedro Fatjó Gómez y Guillem Colom Piella La potencia menguante... el exterior que, realizadas sin criterios claros, ocasionaban un desgaste excesivo de las tropas y de los materiales y perjudicaban la instrucción. Sin embargo, las previsiones de este Libro Blanco tuvieron una vida efímera. A los pocos meses de su presentación, y en un contexto marcado por la crisis económica que estaba acechando el país, el Elíseo puso en marcha la Revisión General de las Políticas Públicas para racionalizar y reducir la administración pública francesa a fin de reducir el gasto público. En el Ministerio de Defensa, su implementación imposibilitó el logro de los objetivos de gasto detallados en la Ley de Programación Militar 2009-14, ya que de los 377.000 millones de € previstos inicialmente se pasó a 340.000, incidiendo negativamente sobre las previsiones de modernización de armamento y material. La aplicación de esta revisión también fue evaluada con severidad por los analistas y por los responsables militares. Entre los argumentos aducidos se destacaba que la reducción de efectivos -sobre todo en el Ejército de Tierra- no se correspondía con los objetivos de presencia e intervención en el exterior trazados en el Libro Blanco; que la externalización del mantenimiento a empresas privadas era demasiado costosa con los presupuestos disponibles; que la primacía del funcionariado civil relegaba a los militares al papel de técnicos secundarios o que el costoso arsenal nuclear era irrelevante para hacer frente a los conflictos actuales o previsibles.44 Desde una posición oficial, como la encarnada por la Comisión de Defensa Nacional y de las Fuerzas Armadas de la Asamblea Nacional, se ha analizado con detalle las implicaciones del incumplimiento de las asignaciones presupuestarias de la Ley de Programación Militar (2009-2014).45 Solamente en los campos de la disuasión nuclear y ciberdefensa se consideraba satisfactorio el balance entre los objetivos marcados en 2008 y su cumplimiento en 2013. En el ámbito del armamento terrestre, si bien se había impulsado la adquisición de materiales de alta tecnología (equipos individuales Felin, artillería autopropulsada Caesar, helicópteros de ataque Tigre o blindados de infantería VBCI), también se había retrasado su ritmo de entregas, incumpliendo con ello los plazos previstos. Además, los equipos más antiguos (camiones, vehículos blindados VAB, AMX-10RC y ERC-90) no tenían substitución, dado el creciente y grave retraso de los programas Scorpion, VBL y PPT. En el caso del armamento naval, aunque se destacaba la contracción del número de fragatas FREEM, de diecisiete unidades inicialmente previstas a solo once, se avalaba el cumplimiento de los plazos de entrega de las primeras unidades y de las fragatas Horizon, los buques de proyección y la versión naval del Rafale, a la vez que se ratificaba la cancelación del segundo portaaviones, se 44  THOMANN, Jean-Claude, “Menace sur notre capacité militaire”, Le Monde, 13 de Mayo de 2008, o BRANCA, Eric, “Où va l’armée française?” Le Spectacle du Monde, Febrero de 2011. 45  Assemblée Nationale, Loi nº 2009-928 du 29 juillet relative à la programmation militaire pour les années 2009 à 2014 et portant diverses dispositions concernant la défense, París: Documentation Française. http://revista.ieee.es/index.php/ieee


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