NACIONAL
Es viernes, 21 de mayo, y 58 reservistas
voluntarios están a punto
de jurar Bandera. En el Centro de
Formación de Tropa (CEFOT) nº 2, en San
Fernando (Cádiz), se vislumbran los nervios
y las ganas de culminar la instrucción
básica. Una etapa de dos semanas que ha
sido el punto de partida para empezar su
nueva vinculación con el Ejército siendo
reservistas voluntarios. En junio completarán
este periodo con el de formación
específica en las respectivas unidades a
las que irá destinado cada uno.
Son futuros reservistas que han compartido
durante estos últimos 15 días una
experiencia conjunta, que difícilmente
olvidarán. En el caso de los Cuerpos
Comunes —como los sanitarios o jurídicos—
es diferente, ya que cada año
rotan, y será el próximo ciclo el que se
adiestre en este CEFOT.
Algunos de los que juran Bandera ya lo
hicieron hace algunos años, cuando realizaron
el servicio militar o prestaron servicio
como militares profesionales. Por
motivos personales tuvieron que dejarlo,
como el aspirante a sargento reservista
Torres: «Estoy cumpliendo otro sueño y
recordando muchos momentos que viví
en el Ejército, además me he encontrado
con otros compañeros con los que he
compartido mandos». Para otros, su otra
vocación se hace realidad. Todos están en
este CEFOT por su pasión por las Fuerzas
Armadas y las ganas de contribuir con su
profesión civil.
27