Page 187

REVISTA IEEE 3

187 Georgina Higueras Disidencia y Derechos Humanos en China derechos humanos del país más poblado del planeta. El principal grupo activista de familiares de las víctimas, formado para exigir una investigación de los acontecimientos del 4 de junio de 1989, fue el denominado Madres de Tiananmen, que dirigió Ding Zilin hasta que, en 2014, con 79 años, pasó el testigo a You Weijie, de 61, cuyo marido murió de un disparo aquella madrugada trágica. “Me imagino que me convertiré en un objetivo de las autoridades, pero suprimir un movimiento democrático con violencia fue totalmente erróneo…Quiero que todas las Madres de Tiananmen, la policía local, la policía de seguridad del Estado y yo nos sentemos a discutir la situación de los derechos humanos en China”,8 declaró el 18 de abril de 2014 a la emisora de propaganda estadounidense Radio Free Asia. El Gobierno chino, en respuesta a las sanciones internacionales y a la fuerte presión de los Estados y las ONG, publicó en 1991 su primer libro blanco sobre los Derechos Humanos en China. El texto hizo una interpretación de la legislación china a partir de la visión gubernamental que concede prioridad a la subsistencia y al desarrollo económico como condición previa para disfrutar en plenitud de los derechos humanos. Según el Carnegie Council for Ethics in International Affaires, la política china en este campo es reactiva en lugar de proactiva, pero aunque la publicación del libro blanco obedeció más bien a presiones externas, su importancia estriba en que hizo que “por primera vez los derechos humanos fuesen vistos como algo que todos los seres humanos comparten”.9 Esta novedosa consideración fue un paso significativo en la normalización del diálogo de China con sus socios occidentales acerca de los derechos humanos. Hoy, 25 años después de Tiananmen, buena parte de la disidencia china en el exilio procede de aquellas protestas que acabaron de forma sangrienta, incluidos sus líderes estudiantiles como Wang Dan, Chai Ling o Wu’erkaixi. Estos se han sumado a otros disidentes de mayor edad “y forman una de las mayores diásporas políticas de la historia, comparable a la de los hugonotes franceses en el siglo XVII, a los rusos de 1919, a los alemanes de 1933 o a los húngaros y checos de los años cincuenta y sesenta”10. Residen también en EE UU Yu Dongyue, que permaneció 17 años en la cárcel por arrojar pintura roja al retrato de Mao que preside la entrada a la Ciudad Prohibida desde la mayor plaza del mundo, y Yang Jianli, quien regresó a China en 2002 con el pasaporte de un amigo, y fue detenido cuando trataba de abordar un vuelo interior. Yang, condenado en 2004 a cinco años de cárcel por espía y entrada ilegal en China, 8  http://www.rfa.org/english/women/tiananmen-04182014105018.html Consultado el 17/05/2014 9  Véase https://www.carnegiecouncil.org/publications/archive/dialogue/1_03/articles/515.html Consultado el 17/05/2014 10  BURUMA, Ian, Elementos perniciosos Una historia de rebeldes chinos, desde Pekín hasta Los Ángeles, Barcelona, Península, 2001, pp. 31


REVISTA IEEE 3
To see the actual publication please follow the link above