133 parte del SNA y que apoyan el vuelo de los usuarios del mis-mo, puedan ser utilizadas por estos con toda garantía de se-guridad y confianza en la señal radiada. La responsabilidad final inspectora y certificadora del SNA es del Estado, por lo que los documentos resultantes del desarrollo de esas activi-dades han de ser sancionados por un funcionario experto en ese campo. La herramienta que se utiliza para llevar a cabo esta fun-ción inspectora y certificadora consta de tres componentes básicos: la aeronave, la consola para el tratamiento de seña-les recibidas durante el vuelo y la tripulación. Los requisitos de la aeronave para utilizarse en la función inspectora están mínimamente definidos en el documento correspondiente de OACI, pero es aconsejable que tenga motores tipo jet, diver-sidad de velocidades, cierta comodidad interior y que admita la instalación de la consola, a ser posible con el operador si-tuado en la dirección del vuelo. También es necesaria una configuración instrumental de cabina de vuelo relativamente actualizada. La consola que se utiliza en vuelo para la función inspec-tora, puede ser muy variada en su configuración y en precio, pero al final, cualquiera que se elija, debe ser capaz de eva-luar todas las ayudas a la navegación que pueden configurar el SNA, así como los procedimientos instrumentales asocia-dos a ellas y los visuales si los hubiera. Como paso final de la herramienta que hemos hablado, al haber efectuado una integración aeronave-consola, con las modificaciones técni-cas e incorporación de nueva documentación, es preceptivo conseguir todas las certificaciones necesarias que permitan volver a operar con la aeronave, de forma genérica, como con la configuración inicial. La tripulación que va a realizar la labor inspectora ha de tener todos los permisos y licencias propios del personal de vuelo, así como la propia para desarrollar la actividad inspec-tora, además de la formación adecuada a la actividad espe-cífica que va a desarrollar. Curiosidades previas al sistema AFIS Antes de utilizar el sistema AFIS, las aeronaves Falcon 20 de inspección en vuelo tenían instalada una consola francesa, la cual se consideraba semiautomática. Era muy completa en su época y fácil de manejar, pero técnicamente muy delicada. Su operación era manual y también el análisis de los resultados obtenidos en vuelo. Curiosamente, tenía un programador muy elemental, en el que se definía la función a realizar y registrar de forma manual. Esto era posible median-te puentes de cableado, que unían puertos determinados sobre una tabla, los cuales tenían funciones y toma de datos específicos en cada uno de ellos. Se trabajaba sobre un registrador gráfico de 10 canales que, inicialmente, era de agujas impresoras de tinta. Poste-riormente se modernizaron cambiándose a impresión térmi-ca. A bordo, la posición de los operadores (eran necesarios dos en cada misión) de la consola era perpendicular al sen-tido del vuelo, lo que ocasionaba unas condiciones de vuelo desagradables y de cansancio, a la vez que sentimiento de mareo después de varias horas de misión. Se necesitaba tiempo para acostumbrarse y evitar el mareo. Compás de once puntas
AEROPLANO 35
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