Page 47

RSM_75_2

Plaza Torres, JF., et. al. Figura 12. Migrantes ingresados en Enfermería por patología (Pg). lesión sobrepasaba las capacidades de su barco. Si era necesario, el barco de guerra se dirigía a su encuentro y el oficial médico o el ATS transbordados por medio de botes neumáticos asistían al paciente in situ. Una vez valorada la gravedad lo atendían en el propio pesquero o lo evacuaban al buque de la Armada. En un segundo tiempo podía ser nuevamente evacuado a tierra en este buque de guerra si se encontraba próximo a finalizar el periodo de vigilancia o bien en otro, de guerra o pesquero que navegara próximo y que se dirigiese a algún puerto. Sin embargo en los últimos años, únicamente en dos ocasio-nes se describe detalladamente el apoyo médico realizado por oficiales del Cuerpo Militar de Sanidad sobre un número eleva-do de migrantes que navegaban en un mismo barco y que fueron auxiliados por unidades de la Armada. El 1 de enero de 2002, la fragata F-75 Extremadura integra-da en la STANAVFORLANT (Standing Naval Force, Atlantic) tomando parte de la Operación “Direct Endeavour”, mientras patrullaba al sur de las islas griegas Kárpatos y Rodas recibió un aviso de socorro del barco Aydin Kaptain. Este buque sin capitán ni tripulación (habían abandonado ya el citado barco), con da-ños estructurales graves, escaso combustible, mala mar, práctica-mente sin gobierno y con 254 migrantes ilegales a bordo (de ellos 32 niños, 4 mujeres -1 de ellas embarazada- y dos heridos) iba a sufrir un hundimiento inminente. Tras la valoración sanitaria por el equipo de socorro enviado por la Fragata F-75 se procedió a organizar su evacuación empleando sucesivamente helicópte-ros Super Puma y SH-60 de la marina griega14. El 26 de noviembre de 2002, el Buque de Apoyo al Combate Patiño integrado en la operación “Libertad Duradera” en aguas del Océano Índico protagonizó el rescate de 95 migrantes a bor-do de la embarcación Duuarée15. En un primer momento se lan-zó el helicóptero embarcado Sea King de la 5ª Escuadrilla que apreció en los náufragos signos evidentes de demanda de auxilio y el lanzamiento a la mar de cuatro cadáveres. Se iniciaron inmediatamente las tareas de rescate y se alistó el buque para el embarque de los náufragos. El servicio de sanidad (1 equipo quirúrgico, 1 oficial médico, 1 oficial odontólogo, 4 110  Sanid. mil. 2019; 75 (2) oficiales enfermeros y 5 sanitarios) se prepararon para recibir un número indeterminado de presuntas “bajas” para lo que se toman las primeras acciones de índole sanitaria: a) Establecimiento del puesto de socorro y área de recepción de bajas, escogiéndose el local de “manipulación de la car-ga” por fácil accesibilidad, tamaño, ventilación y hallarse a cubierto. b) Dotación de dicho puesto con material sanitario suficien-te (guantes, sueros, gasas, sistemas de goteo IV, vías in-travenosas, material de curas, etc…) trasladado desde el pañol de farmacia y enfermería del hospital. Se rescataron 95 personas y se encontraron 3 cadáveres (uno de ellos recuperado del agua y los otros dos procedentes de la bodega de la embarcación). Una vez rescatada se procedió a la clasificación de los náufragos por miembros del servicio de sanidad, que adoptaron medidas de autoprotección (guantes y mascarillas), se introdujeron todos los enseres de los náufragos en bolsas de plástico, se les restringió la circulación a bordo es-tableciendo un único aseo para su uso y se advirtió por órdenes generales la obligatoriedad de cambio de uniformidad y ducha antes de acudir a los turnos de comida. Se realizó atención a 95 personas (62 varones, 33 mujeres, de entre ellos 7 niños). Presentaban muy mal estado higiénico. Casi la totalidad de los atendidos presentaban diversos grados de desnutrición, deshidratación e insolación. Las patologías más frecuentes encontradas fueron: 75% enfermedades infecciosas (destacando piodermitis, conjuntivitis purulentas, artritis infec-ciosa y uretritis), el 50% con alteraciones cutáneas (úlceras sa-cras, en zonas de pliegues, genitales y extremidades). En muchos se observaron síntomas compatibles con trastorno de ansiedad y presencia de hematomas. Los tratamientos llevados a cabo consistieron en reposición hidroelectrolítica intravenosa. Los que se encontraban con ade-cuada tolerancia oral recibieron agua y leche en cantidades pro-gresivas apreciándose en muchos casos síntomas de intolerancia-plenitud gástrica con náuseas y vómitos tras beber con avidez. Más tarde, se procedió a limpieza, desinfección y entrega de


RSM_75_2
To see the actual publication please follow the link above