Civil que él mismo presidió en el Palacio Real, indicó que este Cuerpo «nació bajo el reinado de Isabel II y ha permanecido desde entonces, de manera incansable, prestando un gran servicio a la sociedad española». Seguidamente, reiteró el «reconocimiento y profundo agradecimiento» al Instituto Armado y a los más de 75.000 hombres y mujeres que lo conforman hoy en día, «por su vocación, profesionalidad y dedicación; por su constante y ardua labor en favor de la seguridad y bienestar de todos los españoles. Su lealtad y compromiso con el Estado de derecho —añadió— han sido y son un pilar fundamental en el desarrollo de nuestro país». Más adelante, el Rey se refirió a las misiones en el exterior, en las que «nuestro país, junto a sus socios europeos, quiere avanzar hacia una Europa cada vez más fuerte y unida que sea capaz de tomar decisiones de manera eficaz en cuestiones relativas a su seguridad y defensa». Recordó que España, «como claro defensor de este camino», participa como mayor contribuyente de tropas en las seis misiones que la UE lleva a cabo en Europa, el Mediterráneo, África y el océano Índico. Además, continuó el Monarca, «ha asumido con eficacia la responsabilidad del mando de la operación Atalanta en marzo del año pasado, que desde entonces se ejerce desde el nuevo cuartel general multinacional de la Unión Europea situado en Rota, y que recientemente tuve la ocasión de conocer». Actualmente, cerca de 3.000 militares se encuentran desplegados en cuatro continentes, cumpliendo 16 misiones bajo bandera de la UE, la OTAN o las Naciones Unidas. «A todos ellos —recalcó Felipe VI— quiero trasladarles mi profunda satisfacción por la excelente labor que realizan, sin olvidar a sus familias que les apoyan y animan en su difícil tarea lejos del hogar». A continuación, recordó a los presentes que, hace ya casi un año, el pasado 30 de enero, había tenido «la satisfacción» de viajar a Irak, en su segunda visita como Rey a fuerzas españolas en el exterior, donde se reunió con las tropas desplegadas en Bagdad y Besmayah. «En estos días, como ha dicho la ministra, estamos pensando mucho en ellos», apuntó Don Felipe, y comentó que, en aquella visita pudo comprobar sobre el terreno «la complejidad y la importancia de la misión de asesorar y adiestrar a las fuerzas de seguridad iraquíes, así como la excelente preparación y entrega de nuestros soldados». «Me alegró especialmente —añadió Su Majestad— escuchar de las autoridades locales el impacto positivo que genera su trabajo en la lucha contra el terrorismo y en favor de la paz y la estabilidad de la región; aún con las enormes dificultades que sigue padeciendo la zona tras décadas de inestabilidad y enfrentamientos armados». En estas misiones en el exterior, subrayó, nuestros militares llevan a cabo su labor «con excelencia, con valor y, Antes de iniciar su tradicional mensaje en el Salón del Trono, Don Felipe impuso 21 condecoraciones a personal de diferentes Cuerpos y Empleos. en muchas ocasiones, con heroísmo. Siempre demostrando una calidad humana y un respeto que han merecido la confianza y el aprecio de la población donde se han desplegado. Sois, por ello, un ejemplo de dignidad y grandeza para la imagen y el prestigio de España». Don Felipe tampoco quiso dejar de recordar que «nos enfrentamos a un entorno global de seguridad en constante y rápida evolución, en el que la complejidad y la incertidumbre son norma, no excepción; lo cual implica nuevas amenazas y riesgos para nuestra seguridad y plantea nuevos desafíos a la estabilidad internacional». Todo ello, añadió el Rey, «nos exige un gran esfuerzo, que no espera y que nos pone a prueba» y «la necesidad de disponer de las capacidades adecuadas —y de mantenerlas— para atender los ámbitos tradicionales de actuación, y ser capaces de operar eficazmente en otros nuevos, como el ultraterrestre y el ciberespacio». Atender a esos retos, continuó, «requerirá de la experiencia, la profesionalidad y la permanente capacidad de adaptación y liderazgo de nuestras Fuerzas Armadas, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Servicios de Inteligencia». El Monarca concluyó su intervención trasmitiendo a los militares «el apoyo permanente de la Corona y de los españoles a vuestra labor constante y abnegada de servicio a España y animaros a continuar cumpliendo vuestra noble misión con ilusión y determinación ». Para finalizar el acto, Don Felipe y Doña Letizia se desplazaron al Salón de Columnas, donde mantuvieron un encuentro con las autoridades asistentes y los miembros de las comisiones militares. Víctor Hernández Fotos: Pepe Díaz/Pool EFE Enero 2020 Revista Española de Defensa 11
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