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REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA 337

Detalle del cuadro de Ferrer-Dalmau que lleva por título el nombre del corredor hispano que cruzó Europa de Milán a los Países Bajos. última Homenaje al Camino Español Correos emite un sello dedicado a esta hazaña logística sin par y el Museo del Ejército acoge su presentación Para celebrar el 450 aniversario de la apertura del Camino Español —corredor logístico que atravesó Europa de Milán a Flandes a lo largo de los siglos XVI y XVII—, Correos y el Museo del Ejército se han dado cita en la institución militar con sede en el Alcázar de Toledo. Así, la antigua residencia real acogía el 28 de febrero pasado la presentación del sello emitido días antes por la entidad postal. Acto en el que hubo lugar para recordar los hitos de la longeva y continuada acción militar (ver RED núm. 277) que, se dice, «asombró a Europa». IMPULSOR Y RUTAS PRINCIPALES El perfil del rey Felipe II, cinco flechas —una por cada una de las principales rutas que siguieron los soldados españoles— y el emblema del Ejército de Tierra sobre un mapa difuso ilustran esta estampa de la colección de Efemérides y en la que sobresale tanto el nombre de la hazaña recordada, como el guarismo de la insigne conmemoración. El aniversario exacto tendrá lugar el próximo 17 de abril, ya que fue tal día de 1567 cuando el citado monarca decía adiós en el Palacio de Aranjuez (Madrid) a uno de sus generales más sobresalientes: Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel, el Gran Duque de Alba. El noble partía hacia a Flandes, a los Países Bajos, para asumir el cargo de gobernador de los citados territorios, entonces parte de la Monarquía Hispánica y que incluían a la actual Holanda, Bélgica, Luxemburgo, así como algunos departamentos franceses. La designación real implicaba la pacificación de aquellas tierras por lo que le acompañaban 10.000 veteranos de los tercios. La expedición, además, no iba a tomar una de las más habituales rutas marítimas desde el Cantábrico. El panorama estratégico había cambiado y ahora el mar surcado sería el Mediterráneo y Milán el punto de partida para llegar por tierra a través de territorios de la Corona y estados amigos, lo que suponía además un perfecto encaje de bolillos diplomático. Después del Gran Duque y sus 10.000 hombres, millares de soldados de la Monarquía Hispánica mantuvieron y recorrieron esta conexión con Flandes a lo largo del XVI y el siglo siguiente. E. P. Martínez 66 Revista Española de Defensa Marzo 2017 El Camino Español. Ferrer-Dalmau. Foto: H. Gicquel


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