Editorial D operativo o funcional, es de destacar el papel que juega el “Escuadrón” como unidad de fuerza aérea en la que reside toda la esencia del Poder Aéreo. Ya sea con aeronaves o sin ellas, en labores operativas o de apoyo a las operaciones, es a nivel escuadrón como actúa el EA para llevar a cabo su misión, donde se desarrolla la actividad del día a día y en el cual se adiestran y se preparan las fuerzas. En ellos se da cabida a los medios personales y materiales aéreos que posibilitan el desarrollo de nuestras capacidades inherentes y nos permiten diferenciarnos de los demás componentes de las Fuerzas Armadas, actuando siempre con mentalidad aviadora, con iniciativa y con libertad de acción, en beneficio de la acción conjunta. Cada aviador se identifica con su unidad más elemental, sintiéndose parte intrínseca de la misma. Ahí reside el legado de los que formaron parte de ella y de sus logros, en forma de historia y tradiciones. La cultura aeronáutica, enmarcada dentro de la cultura de defensa, se considera un factor de cohesión fundamental entre el EA y la sociedad civil; es labor de los escuadrones seguir contribuyendo a la difusión de nuestro compromiso de servicio a los españoles. Esta perspectiva de divulgación de imagen institucional desde la unidad elemental está en sintonía con lo expuesto en el quinto eje estratégico de la Visión del JEMA. D Revitalizando los escuadrones Además, hay que preparar al personal para aprovechar al máximo la integración multidominio de Poder Aéreo de los nuevos entornos como el de la percepción, el ciberespacio o el temporal. A su vez, los escuadrones deben ser aptos para hacer realidad el concepto de fuerza expedicionaria, estar en disposición de ser apoyadas por otras unidades que complementen sus capacidades o integrarse en otras agrupaciones aéreas tácticas expedicionarias (AAT-EX), justificando de esta forma la necesidad de interoperar. Asimismo, son las unidades que sufren las consecuencias de los recortes presupuestarios, con merma en su potencial humano y en la disponibilidad de material, sobre todo cuando surgen capacidades aéreas inéditas y sobrevenidas que es preciso asumir. Al objeto de mantener una disponibilidad de fuerzas creíble y aceptable, el actual escenario exige una fuerte implicación en conservar capacidades permanente. E entro de la estructura del Ejército del Aire y de todos los elementos que lo conforman, bien de carácter gestor, esde un punto de vista estratégico, es necesario acometer un dimensionamiento adecuado de nuestros escuadrones para que estén en condiciones de contrarrestar cualquier amenaza, acorde con el escenario más desfavorable y en un ambiente degradado. Para ello, se debe contemplar y analizar los roles de nuestras unidades más elementales para seguir garantizando el cumplimiento de todo tipo de operaciones aéreas y estar preparados para contribuir, si es preciso, en el proceso de generación de fuerzas con todas las capacidades necesarias. y la aplicación directa en el concepto aumentando su modularidad, eficacia y aéreas críticas y no perderlas de forma l “Escuadrón” simboliza varios de nuestros valores diferenciales: la autonomía de acción, la implicación, la resiliencia y la firme voluntad de vencer de sus miembros. Sin cimientos sólidos dirigidos mediante un liderazgo eficaz, la acción rápida, versátil y flexible del poder aéreo no sería posible. Para garantizar el buen funcionamiento de la unidad, el papel del jefe de Escuadrón resulta clave, inculcando en sus subordinados un sentimiento de entrega y afán de superación en todos sus actos. Numerosos retos son los que tendrán que asumir en el futuro: materializar el proceso de modernización de un futuro sistema de combate aéreo, operar nuevas plataformas aéreas o estar preparados para desarrollar novedosos sistemas de sostenimiento. Los escuadrones proporcionan formación, seguridad y sentido de pertenencia, generando una vinculación que va más allá de la situación administrativa del aviador. Fortaleciendo y revitalizando el escuadrón, se fortalece y revitaliza al EA. • REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Octubre 2016 819
REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA OCT 2016
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