nacional La formación que reciben los alumnos de la Escuela Militar de Intervención les capacita para ejercer el control económico y financiero en centros y unidades de las FAS. la adaptación y la racionalización de estructuras sin afectar a la operatividad durante el periodo de transición. «La Academia es un gran puzle en el que se integran hoy, perfectamente encajadas, seis escuelas y un centro universitario», aclara el director de la Academia, el coronel Ángel Turienzo. Academia Central de la Defensa rada en el ámbito civil. Pero seis meses después de dar el salto, no se arrepiente. «La sanidad militar te ofrece una buena formación, está bien dotada y te ofrece la posibilidad de participar en misiones internacionales humanitarias que te engrandecen como persona». Martínez Marín es uno más de los 276 alumnos que estudian este año en la Academia Central de la Defensa (ACD), donde se forman los futuros médicos, enfermeros, farmacéuticos, veterinarios, odontólogos, psicólogos, jurídicos, músicos e interventores que trabajarán en los ejércitos y en la Armada, los Cuerpos Comunes de las Fuerzas Armadas. La ACD es también el espacio donde cientos de militares reciben cada año formación de perfeccionamiento en sus escuelas de Ciencias de la Educación y de Idiomas. La Academia nacía hace casi cuatro años, en junio de 2014, bajo la dependencia de la Subdirección General de Enseñanza Militar, «con el fin de hacer más eficientes las estructuras educativas » del Ministerio. A pesar de su corto recorrido, el nuevo centro heredaba la estructura del hasta entonces Grupo de Escuelas de la Defensa, con una trayectoria de décadas en la formación de militares, lo que ha permitido efectuar En el recinto de la Academia, en el barrio de Carabanchel, junto al Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla, conviven los alumnos de las escuelas militares de Estudios Jurídicos, Intervención, Sanidad y Músicas Militares, que este año suman ya 119 estudiantes. Acuden con la titulación específica requerida en cada caso para completar en la ACD su fase de instrucción y de especialización militar. A ellos se unen también los 157 alumnos del Centro Universitario de la Defensa, que simultanean la formación militar en la Academia con su carrera de Medicina en la Universidad de Alcalá de Henares, gracias a un convenio de adscripción efectivo desde 2012. En la Academia, aún con necesidades de plantilla por cubrir, trabajan diariamente 120 militares y medio centenar de civiles, de los cuales casi una tercera parte corresponde a personal docente, concentrado en su mayoría en la Escuela Militar de Sanidad. «La integración de todos los estudios exige una gran esfuerzo de coordinación y de apoyo logístico», reconoce el coronel Turienzo. Esa labor hace posible que en el pequeño campus la actividad no se detenga nunca. A media mañana, mientras muchos alumnos comienzan sus clases en las aulas, otros Los alumnos pasan primero por un periodo de instrucción y adiestramiento en las Academias Generales del Ejército de Tierra y del Aire y en la Escuela Naval Militar. Marzo 2018 Revista Española de Defensa 15
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