T R O P A S D E M O N T A Ñ A
MONTAÑEROS Y MILICIA / 55
Bueno, primero y fundamental con mi
padre, militar y montañero. Después
hice el servicio militar en la Escuela Militar
de Montaña en Candanchú, 2 años
como “voluntario” en la Compañía Esquiadores
Escaladores. Posteriormente,
cuando organizábamos las grandes
expediciones del Grupo Militar de Alta
Montaña, fueron muchos años de contacto
muy estrecho.
Hoy en día, entre mis amistades hay militares
con los que salgo al monte, a escalar…
con muchos nunca hemos perdido
el contacto.
Fruto del contacto estrecho que has tenido
con componentes de estas tropas,
¿cuál sería uno de los valores que más
destacarías de estos militares?
Su dureza, son gente todo terreno. Eso
sí, combinado con la humildad, discreción
y la fidelidad que les caracterizan.
Además, quiero destacar que tienen mucha
facilidad para formar grupos muy
cohesionados, y muestran mucho interés
por su preparación, que, por cierto,
la que tienen está al máximo nivel mundial
de lo que es montaña, no tienen
nada que envidiar a ningún país.
Has trabajado también o has visto o
tropas de montaña de otros países,
¿qué destacarías de ellos?
El tema supervivencia Ártica. Los países
escandinavos, especialmente los
ejércitos de Noruega y Suecia siempre
me han impresionado, su capacidad de
supervivencia en ambiente de frío extremo,
incluso en la noche. Saber desenvolverse
con soltura en terrenos permanentemente
nevados. Como yo digo con
cariño, “estos vikingos son impresionantes
en su medio”.
¿Querrías trasladar un mensaje a los
actuales componentes de las tropas de
montaña?
Sobre todo, un mensaje de mucho ánimo.
Tienen una muy buena preparación,
son gente con mucha vocación.
Está todo muy bien encarrilado y organizado.
Además, quiero destacar que me
siento integrante de “la familia militar y
montañera” y orgulloso de haber estado
en esta casa y colaborar siempre que se
me requiera.
Antonio Tena Sanz
Stte. Jefe OCP RICZM 64