Page 18

REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA OCT 2016

gran parte del grado de compromiso de los miembros del equipo y sabemos que sin participación no hay compromiso. En cada misión, el trabajo no termina con su cumplimiento sino que se extiende hasta que las enseñanzas obtenidas sean aplicadas. Trabajo de equipo que exige delegación y confianza. La capacidad de adaptación a situaciones inesperadas y complejas y la flexibilidad para actuar en consonancia, ajustando las normas generales a la cambiante realidad, es una característica esencial en el piloto militar. Así como los aviones necesitan ir en contra del viento para alcanzar el cielo, las adversidades deben servir de estímulo para remontar el vuelo. No somos libres de elegir lo que nos pasa pero sí para responder a lo que nos pasa (Fernando Savater). Situaciones que exigen valor para tomar una decisión en milésimas de segundo. Valor que en el piloto no es irracional sino atemperado por la acomodación de sus reacciones a cada circunstancia que le hacen no perder el control de la situación en momentos de tensión. ¿No sabes tú que no es valentía la temeridad? (Miguel de Cervantes–Don Quijote de la Mancha). Para algunos es lo que se conoce como “nervios de acero”, potenciados por la instrucción y el adiestramiento en el que se simulan esta clase de adversidades (emergencias, rapidez de respuesta, acumulo de información, etc.). Este conjunto de reacciones y comportamientos ante situaciones extremas definen el carácter, que en el piloto militar debe ser fuerte y firme para poder enfrentarse a la adversidad. Cuando no sopla el viento, incluso la veleta tiene carácter (Stanislow Lec). Para el piloto, rodeado de una tecnología compleja y de un escenario que evoluciona a gran velocidad, el proceso de la decisión parece requerir el mismo ritmo vertiginoso para lo que es necesario que la disciplina, elemento primordial en una organización, sea completada con cierto grado de iniciativa. En la soledad de su cabina debe gestionar cada eventualidad sin esperar a que el jefe le vaya ordenando todo. La planificación se lleva a cabo contando con sus subordinados, la decisión se toma en solitario. El espíritu de iniciativa no es opuesto al de disciplina, al contrario, es un multiplicador de la eficacia, con la condición de que concurra rigurosamente a alcanzar el objetivo perseguido. No significa hacer lo que se quiera sino hacer lo que se debe . En el desarrollo de sus cometidos el piloto, a pesar de no tener toda la información deseable y estar sometido a la tiranía de la urgencia, debe decidir. En estas circunstancias apoyarse en determinados valores y convicciones ayudará a tomar la decisión correcta. Cómo es posible que esta época tan amante de la cultura pueda ser tan monstruosamente inmoral (Albert Einstein). Los valores son como las alas para volar cuando necesitamos descubrir horizontes más altos y la brújula para orientarnos cuando nos encontramos perdidos. Nos generan confianza y seguridad. Asumir los valores de nuestro Ejército es uno de los requisitos básicos, no solo para el piloto, sino para todos sus miembros en el cumplimiento del deber. En el piloto no cabe la indecisión ni la inactividad que le puede llevar a la fatalidad. Uno de nuestros jefes de Estado Mayor decía que En un carro de combate nos podemos parar y bajarnos, en un barco nos podemos parar pero no bajarnos y en un avión ni nos podemos parar ni nos podemos bajar. Se requiere valentía y acometividad para superar el más mínimo atisbo de indecisión. La cualidad más importante de un buen líder es estar dispuesto a tomar decisiones (general George Patton). La acometividad es una de las características que más se ha destacado en el piloto militar y en concreto en el de combate. En esencia, más que agresividad es capacidad para emprender acciones difíciles y arriesgadas, para gestionar lo imprevisto, para adaptarse a cada situación, para enfrentarse al reto de acercarse a la perfección. A pesar de los cambios y las nuevas exigencias, el piloto militar sigue siendo un profesional formado para la acción, para tomar decisiones con poco tiempo de reacción. Con las bayonetas se puede hacer cualquier cosa menos sentarse encima (Wellington). Se dice que cada vez es más importante “saber actuar” frente al “saber hacer”. Para el piloto no es 832 REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Octubre 2016


REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA OCT 2016
To see the actual publication please follow the link above