internacional La Europa de la Defensa avanza CON PASO FIRME Los ministros aprueban trece nuevos proyectos PESCO, de los que España lidera uno y participa en otros seis ERA la última reunión del Con-sejo Europeo a nivel de titu-lares de Defensa del 2019. Y los ministros —reunidos en la capital belga el 12 de noviembre— aprovecharon la ocasión para analizar los progresos conseguidos y definir las prioridades para seguir avanzando en la consolidación de una Política Común de Seguridad y Defensa. Para ello, centra-ron su trabajo en dos sesiones; en la pri-mera aprobaron trece nuevos proyectos dentro de la Cooperación Estructurada Permanente, —con lo que ya son 47 los programas PESCO que se están desarro-llando de forma conjunta gracias a esta iniciativa para potenciar la base indus-trial y tecnológica y dotar a Europa de las capacidades necesarias—, y discutieron la coherencia entre la PESCO y otras iniciativas como la Revisión Anual Coor-dinada de Defensa y el Fondo Europeo de Defensa. En la segunda, se centraron en las mi-siones y operaciones de la Unión, tanto las actuales como en los posibles nuevos retos o áreas de despliegue. En concreto, los ministros destacaron el compromiso de la Unión Europea con el Sahel y la importancia de las operaciones navales, en particular de la EUNAVFOR Atalan-ta y resaltaron los avances en la concre-ción del concepto «presencias marítimas coordinadas». Una vez más, los socios coincidieron en resaltar la importante la-bor que realiza Europa con sus misiones y operaciones al proporcionar seguridad a los ciudadanos europeos y en los en-tornos donde operan y, al mismo tiempo, actuar como motor de transformación de otras sociedades. La ministra española de Defensa en funciones, Margarita Robles, destacó el liderazgo y fuerte compromi-so de nuestro país en las operaciones al afirmar que «España es el país de toda la Unión Europea que más está contribu-yendo a la misiones de paz, sobre todo en África, donde aporta casi el 25 por 100 de los efectivos» e hizo un llamamiento al resto de los países para que incrementen su participación. Al finalizar, los ministros se reunieron con el vicesecretario general de la OTAN para avanzar en la buena coordinación y complementariedad entre las dos organi-zaciones —en concreto, se habló de mo-vilidad militar, ciberseguridad, amenazas híbridas, lucha antiterrorista y mujeres y seguridad— y debatir la próxima Cum-bre aliada que se celebrará los días 3 y 4 de diciembre en Londres. CAPACIDADES COMUNES El encuentro en Bruselas se inició con la habitual reunión de la Junta Direc-tiva de la Agencia Europea de Defensa (EDA). En esta ocasión, servía también para poner el broche a la labor de Jorge Domecq que finaliza su mandato de cin-co años como jefe ejecutivo de la Agencia. España destacó el importante papel que ha desarrollado la EDA en este periodo como potenciador de las capacidades de Defensa al poner en común las necesi-dades militares más acuciantes con un conocimiento preciso de las posibilidades industriales de los Estados miembros. Una vez constituido el Consejo, los ministros aprobaron la tercera tanda de proyectos que se realizarán dentro de la Cooperación Estructurada Permanen-te. «En concreto —explicó Margarita Robles— hemos dado luz verde a trece nuevos proyectos que se suman a los 34 ya existentes para totalizar 47 proyectos. Este importante número pone de mani-fiesto Los ministros de Defensa de la Unión la madurez ya alcanzada por la Coo-peración Estructurada Permanente desde su lanzamiento hace menos de dos años». España participa en 22 de los proyectos y hasta ahora, lideraba uno, el de Sistema de Mando y Control de Misiones y Operacio-nes. Tal como anunció Margarita Robles, «desde hoy también hemos asumido el lide-razgo de otro nuevo programa sobre pro-tección electrónica aérea. Un proyecto que pretende cubrir tanto una necesidad de la Unión Europea como atender a una caren-cia de la OTAN, y que es un claro ejemplo de cómo la Cooperación Estructurada Per-manente permite facilitar la complementa-riedad y sinergia de las dos organizaciones». Denominado Airbone Electronic Attack (AEA), el programa —en el que también participan Francia y Suecia— permitirá a los aviones europeos y aliados volar de for-ma segura tanto en el territorio de la Unión como en potenciales zonas de despliegue. El sistema, será interoperable con los existentes en la UE y en los Estados miembros e in-cluirá el diseño, desarrollo y pruebas de ca-pacidad de bloqueo múltiple de las señales radioeléctricas mediante el empleo de tec-nologías pioneras con un enfoque modular 50 Revista Española de Defensa Diciembre 2019
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