82 BA conectada inteligente

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82 dossier base aérea conectada inteligente Base aérea conectada inteligente (BAC-i) Alfonso López Soriano Teniente coronel del Ejército del Aire revista de aeronáutica y astronáutica / enero-febrero 2020 En 2015 se aprobó el Plan de Transformación Digital de la Administración General del Estado, que es considerado como una Estrategia TIC, y se centra principalmente en la transformación electrónica de los procesos internos de trabajo, el aprovechamiento de los datos en apoyo a la decisión, y la implementación de la tecnología y herramientas software necesarias. Todo ello, principalmente desde un punto de vista administrativo y de gestión. Posteriormente, en 2018 se aprobó el Plan de Acción del Ministerio de Defensa para la Transformación Digital (PATD-Minisdef) Este proceso de transformación es lento y complejo, de tipo top-down (iniciado desde la cúpula de la Administración General del Estado), pero en breve irá permeando en los Ejércitos/Armada hasta afectarnos a todos sus miembros. Las acciones derivadas del PATDMinisdef en el Ejército del Aire serán dirigidas desde la Secretaría General del Estado Mayor, y entre otras incluirán: — el desarrollo de la estructura de gestión de la información y del conocimiento (GIC) en el Ejército del Aire. — el estudio de los procesos internos de trabajo para su simplificación y automatización. La transformación digital en las Fuerzas Armadas probablemente llegue tarde, pero es innegable que, cuando finalmente lo haga, impactará profundamente en la forma en que llevamos trabajando durante décadas. Por ello, es necesario comenzar cuanto antes a cambiar nuestra mentalidad, huir de la autocomplacencia y de la inercia de querer «seguir haciendo las cosas como siempre se han hecho». Tenemos que cambiar nuestra cultura institucional hacia un modelo que invite a cuestionar cada proceso, que anime a colaborar hasta al último soldado, a presentar ideas nuevas para hacer las cosas, a innovar. Una cultura que no tema ni castigue el error o el fracaso, pues ellos no hacen sino mostrarnos el camino hacia el éxito. El verdadero motor del cambio son las personas, por lo que hemos de ser capaces de aprovechar todo su talento. El pasado mes de abril tuvo lugar el foro Symdex 2019, que estuvo centrado en «El Universo 4.0: La transformación digital en Defensa», y que contó con la participación del Ejército del Aire. Este evento exploraba los avances tecnológicos de la llamada cuarta revolución industrial, o Industria 4.0, y sus posibles aplicaciones en el sector de la Defensa. Dicho foro nos hizo reflexionar sobre otras formas de acelerar este proceso interno de transformación digital, dando lugar a la iniciativa «Base Aérea Conectada-Inteligente». La BAC-i nace como una aproximación de tipo bottom-up (desde abajo hacia arriba) que pretende llamar a las puertas de cada Unidad, base, grupo, escuadrón, escuadrilla o sección, para ofrecer a cualquier miembro del Ejército del Aire la oportunidad de contribuir voluntariamente a diseñar nuestro futuro. La BAC-i deberá sincronizarse y ser coherente con el citado PATD-Minisdef en las áreas en que pudieran solaparse. LA BASE AÉREA COMO NÚCLEO DE LA FUERZA Las bases aéreas constituyen una parte esencial de la Fuerza del Ejército del Aire, principalmente debido a que son las instalaciones desde las que operan nuestros sistemas de armas y las que los protegen; además, son las responsables de la mayor parte del esfuerzo logístico que supone la generación de su actividad de vuelo, y donde reside la mayor parte de su capital humano. De esta actividad no solo depende el adiestramiento de las tripulaciones, del sistema de mando y control aéreo o las operaciones aéreas especiales, sino la disponibilidad 24h del sistema de Defensa Aérea y la capacidad de reacción, proyección y despliegue del Ejército del Aire. En su actividad diaria, las bases aéreas consumen gran cantidad de recursos de personal,


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