dossier Estación Espacial de Maspalomas Gran Canaria. mentación científica en satélites de primerísima fila. Hubo muchos más desarrollos parciales, por ejemplo para el observatorio de rayos X, el satélite XMM, o las unidades de potencia y la rueda de filtros del instrumento Osiris de la ya mítica misión Rosetta, que tras ser lanzada en 2004 culminó en 2016 su espectacular misión mediante un impacto controlado contra el cometa 67P/ Churyumov–Gerasimenko. Centrándose ya en el presente y mirando al futuro, se constata que las estaciones espaciales, que cuentan ya con más de medio siglo de orgullosa historia, siguen jugando un papel primordial, generando una facturación global muy importante y dando trabajo a cerca de 200 personas. En cuanto a la estación de Robledo, el acuerdo entre España y EEUU se ha renovado recientemente y la NASA, con el apoyo del INTA, está ampliando su capacidad con dos nuevas antenas de 34 metros que despejan el horizonte de futuro de la estación para las próximas décadas. Un largo futuro espera, con seguridad, a la histórica estación de Cebreros, tras iniciar su nueva andadura en 2005 como parte del European Space Astronomy Center (ESAC), al que evolucionó la estación de Villafranca y que es, hoy día, uno de los grandes centros científicos de la Agencia Espacial Europea. A lo largo de los últimos años, la ESA ha decidido modificar su modelo de provisión de comunicaciones para misiones en órbita terrestre, externalizando dichos servicios en el mercado comercial internacional. Dos de sus antenas de 15 metros de diámetro, una en Villafranca y otra en Maspalomas han pasado a ser propiedad del INTA, habiéndose iniciado la negociación para hacer lo propio con una segunda antena de 15 metros en Villafranca. Se consolida así el Instituto como una referencia internacional en segmento terreno espacial, gracias a su potente red de antenas de altas prestaciones, dispuestas en dos ubicaciones geográficas diferentes, Maspalomas en Canarias, y Torrejón y Villafranca en Madrid, con una moderna operación centralizada para atender, con la colaboración de ISDEFE, empresa de la que posee el 100 % del accionariado, a las más exigentes misiones, tanto propias como de agencias y entidades de todo el mundo. El Centro Espacial de Canarias (CEC), en Maspalomas, sigue siendo uno de los nodos mundiales del sistema espacial de salvamento y rescate COSPAS-SARSAT, y continúa trabajando para agencias como EUMETSAT y JAXA, así como para empresas, entre las que destacan Hispasat e Hisdesat. Las antiguas misiones de la ESA (Third Party Missions) han sido sustituidas con éxito por el programa Copernicus, con la recepción de los satélites europeos Sentinel. En el nuevo Centro Espacial del INTA en Torrejón (CEIT), prosiguen las actividades para los programas propios y del centro de control de emergencia de EUMETSAT. Por otra parte, las operaciones del programa PAZ están ya disponibles para el lanzamiento a finales del presente año y se están preparando las operaciones como centro de control de la primera pequeña misión de la ESA, CHEOPS. En un futuro cercano, se incorporará la misión INGENIO, cuyo centro de control está asimismo ubicado en el CEIT. 2012 Picosatélite OPTOS vista del interior. 390 REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Mayo 2017
REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA 863
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