dossier nes P1EB y unos pilotos con el curso recién completado. Durante el ejercicio se afianzaron los procedimientos estandarizados sobre reacciones defensivas ante amenazas superficie aire practicando maniobras tipo level-s y slants-s, comprobando su eficacia en combinación con la dispensa de chaff, bengalas y Towed Decoy. Estas prácticas nos permitieron conocer de primera mano las capacidades de la nueva “cinta” y sobre todo el comportamiento de la DASS (conjunto de equipos de guerra electrónica) del P1EB que, hemos de decir ha tenido un muy buen resultado durante el Red Flag. A su vez, en este camino hacia la integración del A/S en la unidad, no ha faltado el entrenamiento el el polígono de Bárdenas. Desde junio de 2016, los integrantes del 111 Escuadrón, con su comandante al frente como experto en misiones A/S, realizaron sus maniobras de prácticas en el citado polígono de tiro utilizando armamento real. El Escuadrón realizó la validación del empleo operativo del pod LITENING III en estrecha colaboración con el MACOM. Gracias a estas prácticas se obtuvieron grandes lecciones aprendidas del pod, su uso y en especial sobre el empleo de códigos láser alternativos. Así que, tal y como ya he mencionado, la prueba de la fiabilidad del pod y su capacidad de iluminación se realizó mediante su empleo real, y esto vendría de la mano de la participación en el ejercicio Tormenta. El Tormenta es organizado por el MACOM y en él participan todas las unidades del E. A. con capacidad A/S, Persiguiendo ese objetivo y con el fin de incrementar la preparación de sus unidades aéreas de combate y de apoyo al combate, el Mando Aéreo de Combate constituyó entonces una Agrupación Aérea Expedicionaria (AA-EXP RF-N 17-2) y se dispuso a prepararla para afrontar en condiciones óptimas el reto que tenía ante sí. Esta Agrupación, liderada por el coronel jefe de la Sección de Adiestramiento y Evaluación del CGMACOM Manuel Ojeda Copete, estaba compuesta por un puesto de mando, elementos de apoyo, ocho EF-2000 (Eurofighter) con denominación C/CE 16 pertenecientes a las Alas 11 (base aérea de Morón, Sevilla) y 14 (base aérea de los LLanos, Albacete), así como dos aeronaves Hércules (TK-10) para misiones de transporte aéreo táctico y reabastecimiento en vuelo. Todas ellas con sus respectivas tripulaciones, personal de mantenimiento, mecánicos y armeros. El 6 de febrero, previamente al comienzo del despliegue, comenzó ese período de adiestramiento que incluiría, entre otras cosas, simuladores para familiarización de las tripulaciones con el escenario del ejercicio así como reabastecimientos en vuelo con el Boeing 767 de la Fuerza Aérea italiana (encargados a la postre de proporcionar el reabastecimiento en vuelo a nuestros C-16 durante el salto del “charco”) perfeccionando de esta manera las técnicas y procedimientos AAR entre ambos tipos de aeronaves. Se realizaron también jornadas de entrenamiento y supervivencia, tanto en el mar como en ambiente invernal, para la familiarización con el equipo de supervivencia del avión y el del propio equipo de vuelo, practicando cómo utilizarlo en situaciones de emergencia. Para ello, contaron con el apoyo de personal especialista perteneciente al Grupo 22 del Ala 11, al Ala 48 y al Escuadrón de Zapadores Paracaidistas (EZAPAC), estos últimos apoyados por la Escuela Militar de Paracaidismo (EMP). Por último y dentro del contexto de las misiones que se iban a realizar en el desierto de Nevada, los C-16 del ALA 11 y el ALA 14, realizaron misiones de ataque aire-suelo, con lanzamiento de armamento real, en el Polígono de Tiro de las Bárdenas Reales (Navarra)... 15 días después aproximadamente del comienzo de esta fase, la Agrupación Aérea Expedicionaria se encontraba en perfectas condiciones para emprender el salto del océano Atlántico. • REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Junio 2017 475
REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA 864
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