Una habitación para el espacio profundo No hay ninguna duda de que las primeras misiones a Marte y hacia los asteroides incluirán entre sus equipos a un módulo habitación, pensado para que los astronautas puedan trabajar, comer, dormir y distraerse durante el largo periplo hacia sus objetivos. Pero ¿cómo debe ser dicho habitáculo? ¿Bastaría con unir la Orion a un módulo parecido a cualquiera de los de la estación espacial, o debería este tener sus propias características? La NASA tiene en marcha desde hace varios años un proyecto específico llamado Deep Space Habitat, en el marco del programa Advanced Exploration Systems/ Habitation Systems, que está desarrollando tecnología y construyendo prototipos de tales instalaciones para que cuando se decida viajar hacia más allá de la órbita lunar, los astronautas puedan disponer de un habitáculo apropiado y perfectamente diseñado para cubrir sus necesidades. EL DSH Los ingenieros del proyecto han dedicado mucho tiempo a pensar cómo debe ser el interior y la distribución de uno de estos habitáculos, pero saben también muy bien que será la experiencia la que determinará su configuración exacta. Por eso, se ha construido un habitáculo terrestre a tamaño natural, el cual puede ser instalado en un lugar determinado, y en cuyo interior pueden vivir varias personas llevando a cabo todo tipo de tareas científicas y de ingeniería, reproduciendo su utilización en un verdadero viaje espacial. Los usuarios son los principales interesados en poner de relieve sus aciertos y carencias para que así, el verdadero habitáculo espacial pueda cumplir con todos sus objetivos. El actual Deep Space Habitat (DSH) es una estructura en una sola planta, que está siendo utilizada tanto para re- Manuel Montes Palacio El tiempo de tránsito para los viajes tripulados hacia los asteroides y los planetas se mide en meses e incluso en años, si tenemos en cuenta el vuelo de retorno. La NASA está diseñando una nave de exploración, la Orion, mucho más avanzada que las Apolo lunares, y también más grande y cómoda para los astronautas. A pesar de todo, nadie puede esperar tener a cuatro personas encerradas durante tanto tiempo en un espacio tan reducido. Más aún cuando la actual tecnología espacial ya permite preparar habitáculos que amplíen el espacio disponible y llevar a cabo una vida mucho más normal, como ocurre a bordo de la estación espacial internacional. Vista general del hábitat DSH (Foto: ESA - F. Didot) REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Diciembre 2017 1011
RAA 869 DICIEMBRE
To see the actual publication please follow the link above