El Ejército del Aire Al igual que en el Ejército de Tierra y la Armada, la evolución de los helicópteros dentro del Ejército del Aire está condicionada, básicamente, a los siguientes tres aspectos: – La necesidad de mantener las capacidades operativas y los compromisos que este tiene asignados: • Transporte de las más altas personalidades del Estado (VIP). • Servicio de Búsqueda y Salvamento (Search and Rescue, SAR). • Recuperación de personal (Personnel Recovery, PR). • Operaciones Aéreas Especiales (Special Air Operations, SAO). • Enseñanza. – La necesidad de alcanzar una mayor eficiencia en la adquisición y sostenimiento de los diferentes sistemas de armas, buscando en la medida de lo posible recursos comunes a los tres Ejércitos. – En relación con la adquisición, el impulso de la inversión en la Industria aeroespacial nacional y europea, así como el retorno económico, social y en I+D+i que dicha inversión pueda proporcionar. Teniendo en cuenta lo anterior, la DGAM, dentro de su Plan Director de Helicópteros, contempla para el año 2027 cinco sistemas de armas (HT.21 (AS332 o Super Puma), HT.27 (Cougar), HD21 (versión AS332C1e), HD.29 (NH.90) y HE.25 (EC.120, Colibrí)) y para el año 2040, dos sistemas de armas (HD.29 y HE.26). Por último, al dejar solo dos familias de helicópteros con el objeto de aumentar la eficiencia, dicho Plan no recoge el posible modelo para el rol VIP ni tiene en cuenta el elevado coste de utilizar el HD.29 para misiones puramente SAR. OPCIONES A MUY LARGO PLAZO (2030-2050) Una vez expuestas las consideraciones y la evolución en el largo plazo de los helicópteros del Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, a continuación, se van a presentar las posibles opciones, en el horizonte temporal más allá de 2030, a tener en cuenta contemplando las diferentes fortalezas, debilidades y condicionantes de cada una de ellas. Super Puma del EA en misión SAR en barco REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Mayo 2019 397
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