NACIONAL
“CARLOS SAINZ / Embajador por Madrid
Piloto de automovilismo
Ser nombrado embajador de la Marca Ejército es una responsabilidad importante, por
lo que en sí conlleva, al ayudar a mejorar la imagen y percepción del Ejército. Pero también
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es un gran orgullo, me apetece enormemente colaborar con esta iniciativa. Haré
todo lo posible como persona del mundo del deporte para tratar de ayudar al Ejército
y dar a conocer el gran desempeño que realiza. Recientemente, hemos visto cómo ha
desempeñado labores más allá de las propiamente militares, ayudando a la sociedad
civil a nivel humanitario. También hay que destacar la importante labor que realiza
fuera de nuestras fronteras, así como las propias de la Defensa de nuestro territorio.
“ROCÍO LÓPEZ / Embajadora por Toledo
Comisionada para las Víctimas del Terrorismo
Trabajo para la Comunidad de Madrid como Comisionada del Gobierno para la Atención
a las Víctimas del Terrorismo. En esta materia se necesita, como en el Ejército,
unión sincera, palabras sin dobleces, ejercicio de memoria, compromiso con la justicia,
respeto a todos, sin preocupaciones personales ni protagonismos excesivos, porque el
objetivo es España. Además, los militares españoles han sufrido también, en sus carnes,
el zarpazo del terrorismo. Los soldados son personas virtuosas, abnegadas, humildes,
que se sacrifican por sus ideales y se saben adaptar a los nuevos tiempos. No tienen
más ambición que la de cumplir con su deber, ser leales y amar sin límites a España.
“FRANCISCO VÁZQUEZ / Embajador por La Coruña
Doctor en Derecho e inspector de trabajo
El Ejército, a través de sus misiones de paz, es el mejor embajador de España y acredita
con su profesionalidad el alto nivel de preparación de la sociedad actual. Como embajador
aportaré los conocimientos adquiridos a lo largo de mi vida pública, poniéndolos al servicio
de los fines de esta iniciativa. Daré testimonio con mi presencia en los actos e iniciativas
de este proyecto y, posiblemente, mi principal colaboración sea la divulgativa, sobre todo
en temas históricos, donde es necesario contrarrestar toda la acomplejada doctrina imperante
que tergiversa la realidad de nuestra historia, el papel que jugaron los ejércitos
y, en definitiva, la propia presencia de España en los acontecimientos de la humanidad.