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MEMORIAL DE CABALLERIA 84

Historia y Patrimonio compartir algunas reflexiones con el lector. Si los distintivos forman parte de la uniformidad reglamentaria, ¿por qué no se adquieren por el propio Ejército según los modelos y criterios establecidos reglamentariamente para luego distribuirlos por la cadena logística como una prenda más?; ¿por qué han de adquirirse de forma particular por el militar en comercios civiles, sin ninguna seguridad por lo que respecta al control del cumplimiento del reglamento en el modelo en venta? Dada la importancia que debiera merecer un distintivo, en el caso de que fuera suministrado por el Ejército podría entregarse en algunos actos formales de la unidad, sometiéndose de nuevo al adecuado control del mando sobre su correcta colocación y respeto a la norma. Son varias ideas que dejo a la consideración del lector. Como curiosidad se presenta una propuesta de escudo ideado para el título de especialista en carros de combate de caballería y encontrada en un libro editado en 195712 por la Escuela de Aplicación de Caballería y de Equitación del Ejército, disponible actualmente en la Biblioteca de la Academia de Caballería. No se ha podido obtener mayor información sobre la trayectoria que pudo sufrir dicha propuesta que no tuvo éxito a la vista del distintivo que se aprobaría unos años después. En alguna consulta de páginas de Internet aparecen unas composiciones de carro y lanzas muy parecidas a la de la figura con afirmaciones sobre el empleo no reglamentario de un distintivo de esas características por personal y alumnos de esa escuela, en la que en 1956 se iniciaban los cursos de carros para oficiales y suboficiales de caballería, aunque no se haya encontrado ninguna información escrita o gráfica que valga para apoyar estas informaciones. Pese a todo lo comentado, no se puede negar que esta misma imagen inspiró el escudo que la Inspección de Caballería adoptó como propio unos cuantos años después. Además merece la pena fijarse en que el carro está mirando a la izquierda, al contrario que en el distintivo de 1959. Esta posición es la que se puede contemplar en distinta simbología propia de las antiguas unidades del Arma de esa época. Volviendo a los hitos más destacados del distintivo reglamentario de 1959, nos debemos fijar en 197113 cuando por primera vez les fue concedido a los tenientes de caballería, en este caso los pertenecientes a la XXVI promoción, coincidiendo con la entrega de sus despachos de oficial, fórmula que se mantuvo hasta los alumnos egresados en 1996, habiéndose incorporado a la medida los oficiales de la escala especial en 197614. En el caso de los suboficiales, los componentes de la primera promoción de la AGBS recibieron su distintivo junto a su despacho de sargento en 1977, cesando igualmente esta medida en 1996. 12 Historial (Breve resumen). 1882-1956. Escuela de Aplicación de Caballería y de Equitación del Ejército. 13 Orden de 18 de junio de 1971. Cursos de especialización en carros de combate para oficiales de infantería y caballería. Diario Oficial número 157. 14 Orden de 1 de junio de 1976 por el que se concede el distintivo a los oficiales que salen de la Academia Especial a partir de la I promoción. Diario Oficial número 127. 78 Memorial de Caballería, n.º 84 - Diciembre 2017 Una propuesta para el distintivo   de especialistas en carros   de combate de caballería HISTORIA


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