industrial y tecnológico específico que tendrá como objetivo «conocer y maximizar la generación de capacidades industriales y tecnológicas nacionales que permitan a España influir en todos los desarrollos» según declaraciones oficiales emitidas por el Ministerio de Defensa, lo que permitirá un posicionamiento del ecosistema nacional (industrial, académico e investigación) en las futuras fases de diseño, desarrollo, producción y servicio. A medio plazo, una vez se definan las competencias y participaciones en los diferentes programas tecnológicos que se desarrollarán para el NGWS y con la previsible adjudicación a finales del presente año, la entrada en el mismo otorgará tanto relevancia a la industria nacional aeronáutica en todo el ciclo de vida del programa como la adquisición de nuevas tecnologías de carácter dual que podrán exportarse transversalmente a otros sectores industriales ajenos al aeronáutico, como ya ha sucedido en el pasado, generando asimismo en el camino un know how en las diversas ramas de la ciencia e ingeniería a través de programas de investigación y desarrollo asociados, involucrando a universidades y centros tecnológicos de todo tipo. En lo que respecta al FCAS, es reseñable la participación activa de España desde antes incluso que se diseñase el concepto de «sistema de sistemas», al ser partícipe del desarrollo y fabricación de los cooperadores (A400M, MRTT, Eurofighter, UCAVs y satélites) a través de las diversas sedes de Airbus ubicadas en la península ibérica, a lo que se sumaría tanto la continuidad de los diversos paquetes de trabajo en los que actualmente participa como la adjudicación de futuros, conforme aumenten las capacidades de estos activos según se implementen sobre los mismos o bien la integración de nuevos paquetes de mejora o bien actualizaciones de vida media que en ambos casos permitan la integración en la nube de combate. De esta forma, se mantendría el tejido industrial y académico actual, resultado de las inversiones españolas en programas como el Eurofighter, así como lograr una especialización y desarrollo de nuevas capacidades y tecnologías que complementen y mejoren a las ya existentes, desarrolladas durante estos años de participación en Programas Especiales de Armamento. En definitiva, y recordando las palabras del general Ignacio Azqueta en 1984 pronunciadas con respecto a la adquisición de los F-18 como resultado del Programa FACA (Futuro Avión de Combate y Ataque), tanto el FCAS como el NGWS representan «el mejor zapato para nuestro pie». n Vista fontral del concepto FCAS presentado en Le Bourget 2019 Fotografía de H. Goussé para Airbus REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Septiembre 2019 673
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