ACTUALIIDAD DE LA BRIIPAC
casco, chaleco, guantes y fusil que completamos
en algo más de 3 horas.
Aunque solo hayan sido 30 días, me quedo
con esa sensación de sentirme como en casa, sin
querer salir de la Base, ese café de la máquina a
las 6:50 h antes del amanecer en el alojamiento
con el saludo habitual al páter quien tenía su Misa
diaria a las 6:55 h, escuchar los toques de Diana,
Bandera y Oración, esos buenos ratos con mi
compañero reservista, el Tte. Marcos con quien
he vuelto a coincidir y aquel olor de café recién
molido en la 7.ª compañía.
La actividad del último día no pudo ser más
completa y emotiva, después de la Marcha de
15 km, el acto homenaje a los caídos donde
pude despedirme de GEBRIPAC y del coronel
Fernández Herrero, jefe del Regimiento
«Nápoles» n.º 4 de Paracaidistas.
Al mediodía el acto para despedirme en la
sala de la II Bandera con el teniente coronel
Amezcua, su Plana Mayor junto a los mandos de
las cinco compañías acompañados también por
los tenientes y ese bonito detalle recibido de la
agenda personalizada.
Por la tarde me esperaban para despedirme
ese magnífico grupo humano de oficiales y
suboficiales de la 6.ª y 7.ª Compañías con quienes
de forma distendida pude compartir y disfrutar de
unas cervezas.
Esa taza me recordará siempre el grito de la 7.ª
Compañía cuya historia no olvidaré: «A Tzelata
o al Cielo» (Tte. Ortíz de Zárate).
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Instrucción paracaidista
Instrucción de transmisiones y armamento
Estadísticas al regreso de la marcha de 15 km