La imagen muestra un diseño preliminar de la misión. Desde entonces, se han modificado sus paneles solares. (Imagen: Peter Rubin/CalTech/SSL) el gran telescopio Hale del observatorio Palomar, el cual recibirá los fotones codificados en tierra y los retransmitirá para su interpretación. El cohete de la sonda Psyche situará a su carga en una trayectoria heliocéntrica, es decir, alrededor del Sol. Para viajar hacia el cinturón de asteroides, así como para obtener la órbita prevista alrededor de su objetivo, la nave utilizará un novedoso sistema de propulsión eléctrica basado en impulsores de efecto Hall SPT-140. La propulsión iónica es extremadamente eficiente y puede funcionar durante mucho tiempo, si bien su empuje es relativamente reducido. El sistema iónico de la Psyche tendrá un empuje de solo 280 mN, pero podrá funcionar durante muchas semanas, acelerando lentamente hacia su destino. Para lograrlo, utilizará la electricidad generada por sus dos grandes paneles solares, así como un total de 425 kg de xenón, el combustible a partir del cual se producirán las partículas iónicas a alta velocidad que generarán el empuje. Se ha calculado que este sistema permitirá llegar mucho antes a Psyche y consumiendo menos combustible que si se utilizaran los medios químicos habituales. El asteroide se hallará a 3,3 unidades astronómicas de distancia en el momento de su exploración. Para generar la electricidad necesaria, la sonda dispondrá de un par de paneles solares muy grandes, lo que proporcionará al vehículo el tamaño aproximado de una pista de tenis. Más concretamente, la nave medirá en total, con los paneles desplegados, unos 25 metros de largo y algo más de 7 metros de ancho. Por su parte, el cuerpo principal del ingenio medirá 3,1 metros de largo y 2,4 metros de ancho, es decir, un tamaño parecido al de un coche utilitario. En total, se espera que la misión acabe costando unos 850 millones de dólares, dentro de los límites habituales establecidos para el programa Discovery. ÓRBITA DE TRABAJO Como se ha dicho, la sonda Psyche llegará a su destino en enero de 2026. Tras un complejo periodo de maniobras para garantizar la inserción orbital, la nave quedará situada alrededor del asteroide siguiendo una primera órbita (A, de caracterización) establecida a unos 700 km de altitud respecto a la superficie. Esta órbita ha sido seleccionada para proporcionar una cobertura adecuada que permita levantar un primer mapa fotográfico del astro y de su hipotético campo magnético a gran escala. El calendario de misión indica que la nave permanecerá en dicha altitud durante 56 días (o 41 órbitas). Posteriormente, activará su sistema de propulsión para reducirla hasta los 290 km (órbita B, topográfica), desde donde podrá mejorar las mediciones del campo magnético y de su topografía. Transcurridos 76 días y 162 revoluciones desde la entrada en dicha órbita, la Psyche descenderá Esta es la sala de construcción de vehículos de la compañía Space Systems/Loral, que diseñará la plataforma de la sonda. (Imagen: SSL) 282 REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Abril 2019
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