tenido que confiar en las señales emitidas por las radioayudas terrestres situadas en el aeropuerto o sus cercanías. Estos elementos son los responsables de trazar los caminos invisibles que el avión puede seguir y de guiarlo con seguridad hasta tierra sin necesidad de que el piloto sea capaz de ver el terreno hasta pocas millas antes de alcanzar la pista. Pero hoy en Puerto Príncipe esto no va a ser posible. Ninguna de las ayudas a la navegación allí ubicadas presta ya servicio. Por este motivo, todos los procedimientos de aproximación que en su momento estuvieron asociados a las mismas han sido retirados. Aún así, minutos después de iniciar su descenso, el Airbus A310 del Ejército del Aire es capaz de tomar tierra, sin novedad, en la pista 28 del Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture de Puerto Príncipe. Esto ha sido posible gracias a que toda la flota de aeronaves del 45 Grupo de FF.AA. cuenta, desde hace algunos meses, con la aprobación operacional RNP APCH (concretamente, RNP APCH sin guía vertical hasta mínimos LNAV1). INNUMERABLES VENTAJAS Esta aprobación operacional tiene una gran importancia porque permite llevar a cabo un tipo de aproximaciones RNAV2 de no precisión que se está extendiendo a gran velocidad por aeropuertos de todo el mundo. Un ejemplo es el de la capital haitiana. En la práctica, para cumplir con las especificaciones exigidas para realizar esta clase de aproximaciones, las aeronaves emplean como medio de navegación un sistema basado, bien en un sensor GNSS3 autónomo, o bien en un sistema multi-sensor que debe incluir al menos un sensor GNSS4. Las flotas de Airbus A310 y de Falcon 900 del 45 Grupo de FF.AA. cuentan en su totalidad con este último tipo de sistemas mutli-sensor: los computadores de gestión de vuelo instalados a bordo reúnen información de los diferentes equipos de navegación, entre los que se encuentran varios receptores GPS. La gran diferencia de este tipo de aproximaciones con respecto a las convencionales radica, por tanto, en que para llevarse a cabo no son necesarias radioayudas terrestres como las empleadas hasta ahora en los procedimientos NDB, VOR o ILS. Lo que se exige, sin embargo, es que durante la fase de aproximación se cumpla en todo Cabina Pilotos Falcon 900. momento con unos re-
REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA 848
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