Page 78

RAA_886

e instalación. Coordinando a todas las partes implicadas: el Aeródromo Militar de Santiago, el Mando Logístico del EA, la empresa que fabricó parte de los elementos y las distintas secciones de los grupos de ingeniería y de mantenimiento de la MAESMA. La sección de ingeniería, del Grupo de Ingeniería de la MAESMA, diseñó y calculó los fustes, así como los elementos de acople y sujeción de los ejes de las ruedas y los pernos que, embutidos en la zapata, soportarían todos los esfuerzos. El cálculo de la zapata corrió a cargo de la Dirección de Ingeniería/Subdirección de I n f r a e s t r u c t u r a s (DIN/SUINF) del EA. El Aeródromo Militar de Santiago se encargó de todo lo relativo a la construcción bajo tierra: basamento y pernos de anclaje. La Maestranza Aérea de Madrid, de la superficie para arriba: fustes, elementos de acople, modificación del helicóptero, transporte e instalación. La coordinación y la precisión eran esenciales, pues muchas partes se fabricaban y componían en distintos lugares y debía ser todo finalmente ensamblado en el mismo sitio. En otro orden de magnitud, pero al estilo de los programas actuales. Peso total del conjunto: 12 toneladas sobre el suelo y 36 toneladas bajo tierra. Las dimensiones eran grandes: 15 metros de longitud, cuatro de anchura y… 10 metros de altura. ¿Error permitido?, cinco milímetros. Ahí radicaba lo más crítico, pues cualquier fallo haría que las patas del tren no coincidieran con los extremos de los fustes. Mientras se calculaban y diseñaban los elementos, se realizaron muchas reuniones a todos los niveles para detectar cualquier dificultad que pudiera surgir durante cualquiera de las fases, especialmente durante la fabricación e instalación final del aparato. Gracias a la gran profesionalidad de todos los implicados, todo, y digo todo, estaba previsto. No se escapó ni un solo detalle. Se corrigieron a tiempo algunos errores que habrían hecho fracasar el proyecto y quedó de manifiesto la enorme profesionalidad de todas las personas involucradas, la dedicación, el interés constante por el éxito. Finalmente, el lunes 26 de septiembre, con todo listo, salieron el personal y los camiones con el material de las instalaciones de la MAESMA rumbo a Galicia. Llegaron en el mismo día y el 27 por la mañana se comenzaron los trabajos en el aeródromo Acto de inauguración del monumento militar de Santiago. Todas las reuniones y todo el trabajo previo de cálculos, fabricación, coordinación y proyecto dieron su fruto y la instalación fue tal y como se había pensado. El esfuerzo dio su fruto y la instalación pudo completarse en un solo día de los posibles tres previstos. Finalmente, el monumento fue inaugurado el día 5 de octubre por el jefe del Mando Aéreo General, general de división José Alfonso Otero Goyanes, con motivo del acto de celebración del 25 aniversario del Destacamento Militar de Santiago, y al que asistieron las más altas autoridades, civiles y militares, de la región, así como otras personalidades en representación de asociaciones, organismos y medios de comunicación gallegos. Sin duda, el mayor de los valores del Ejército del Aire es su personal. Y en este caso con su interés, esfuerzo y dedicación, se ha conseguido materializar una idea, y desde el 27 de septiembre de 2018 un Puma guarda la entrada del aeródromo militar de Santiago. n 716 REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Septiembre 2019


RAA_886
To see the actual publication please follow the link above