Los "Black Hawks" han sido un icono desde que sustituyeran a otro icono, los “Hueys” que volaron en Vietnam. inventario estadounidense a mediados de la década de 2030. En la actualidad 596 solo quedan dos candidatos en el proceso para sustituir el omnipresente “Black Hawk”, el V-280 “Valor” de Bell Helicopter y Lockheed Martin y el SB-1 “Defiant” de Sikorsky y Boeing, compañías con un largo historial de modelos en la flota de helicópteros del Ejército de EE.UU. Los dos proyectos son aparatos híbridos que combinan la velocidad de los aviones con la versatilidad de vuelo estático y de aterrizaje y despegue vertical de los helicópteros, aunque ambos son conceptos completamente diferentes. “VALEROSO” Y “DESAFIANTE”, LOS DOS CANDIDATOS Bell Helicopters ha aprovechado su alianza con Boeing para presentar un modelo similar al V-22, el único convertiplano en servicio en el mundo. El V-280 “Valor”, similar en aspecto aunque más pequeño y notablemente más ligero que el “Osprey”, aprovecha de él todas las lecciones aprendidas a lo largo de estos años de operación, tanto sus avances tecnológicos como las soluciones a los fatídicos problemas que han marcado su carrera. La mejora fundamental se ha realizado en la rotación del plano. En el V-22 los dos motores dotados con enormes hélices tripalas contrarrotatorias están situados en el extremo de un “ala”. Las góndolas de ambos rotan o basculan para despegar y aterrizar desde una posición vertical, como si fuera un helicóptero, hasta otra horizontal en la que se “transforma” en un avión turbohélice. En recorrer los 90º que separan al helicóptero del aeroplano el “Osprey” necesita 12 segundos, un tiempo escaso que está lleno de problemas. En esta transición se pueden producir problemas aerodinámicos que afecten a la sustentación o los motores, como se ha sufrido, son vulnerables a la ingestión de polvo levantado por el propio aparato. Aunque ha sido desplegado en operaciones de combate en Iraq y Afganistán, y está en uso por las fuerzas especiales estadounidenses y lo estará con las israelíes y japonesas, los “ospreys” han sufrido una larga lista de accidentes con decenas de víctimas en pruebas y maniobras. Para evitar este complejo mecanismo de rotación, además del peso y la vulnerabilidad que añade a la aeronave, el V-280 dispone de un sistema más sencillo en el que solo es la hélice la que se mueve y no toda la góndola del motor. Al ir emplazadas en una posición elevada permiten un acceso fácil a la cabina del aparato a través de dos grandes puertas laterales, conforme a la práctica del Ejército de los Estados Unidos. En su interior pueden acomodarse cuatro tripulantes y 11 soldados completamente equipados. Además del armamento que pueda instalarse en ellas el “Valor” puede montar cañones, cohetes y misiles de diversos tipos. Los dobles ganchos pueden con 4.500 kg. de carga externa, lo que le permitirá transportar a 280 km/h un cañón M777A2 de 155 mm. y a su dotación hasta donde sea necesario. Construido con una notable presencia de materiales compuestos, cuenta con tren de aterrizaje retráctil, cola en V y una avanzada electrónica. Los pilotos volarán con un casco muy «Podrían invertirse hasta 100.000 millones de dólares en la compra de nuevas unidades» El V-280 “Valor” es más pequeño y
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