fuerzas armadas
capacidad se concibe básicamente para
apoyar sobre el terreno una operación
militar per se, con su Cuartel General
desplegado en un área remota con
conectividad limitada, así como para
ejercer de respaldo ante un ataque cibernético
a las instalaciones fijas de la
Base Principal de Operaciones de la
NAGSF, garantizando así la continuidad
operativa de la Fuerza.
«También está pensada para favorecer
la conciencia situacional en entornos
de crisis humanitarias, facilitando
el proceso de toma de decisiones, y
para mantener información actualizada
prácticamente en tiempo real en el
área de un desastre natural», indica el
comandante Arrieta.
Para realizar sus funciones, la Sección
dispone de un Núcleo Permanente
de Despliegue, encargado de
asesorar al comandante de la Fuerza
y liderar los procesos de planeamiento
y ejecución necesarios para proyectar
la capacidad PED, y dos sistemas: la
TGGS (acrónimo inglés de Estación
Terrestre General Transportable), de
carácter más permanente y longevo, y
la MGGS (Estación Terrestre General
Móvil), para una mayor movilidad y
empleo táctico.
La Capacidad Expedicionaria de
la Fuerza AGS es única en el mundo
en su categoría y, una vez alcanzada la
Plena Capacidad Operacional, estará
alistada de modo permanente. «En el
nivel táctico, la MGGS puede estar
plenamente operativa en dos horas y
la TGGS en cuatro», señala el brigada
del Ejército del Aire Jonás Matías.
COMUNICACIONES
El sargento primero del Ejército del
Aire Alejandro Villalobos es el único
español destinado en el área de Comunicaciones
de la Fuerza. Ocupa el
puesto de Frequency Manager, responsable
de gestionar la asignación de todas
las frecuencias para la operación de
los cinco data link con los que opera la
plataforma. Además, forma parte de
un equipo de Gestión de Redes, que
se encarga de la gestión y el mantenimiento
de esos data link y de realizar
las actividades de inspección y mantenimiento
de módems, sistemas satelitales
y radios inalámbricas.
El área de Comunicaciones tiene,
además, otras funciones relacionadas
con antenas satélite y equipos informáticos,
criptográficos y de aviónica.
El suboficial comenta que cada misión
es diferente, con lo que las dificultades
cambian, requiriendo un gran
nivel de adaptación. «Pero el reto más
importante que recae en nosotros es
garantizar unas comunicaciones fiables,
rápidas y seguras, sin olvidar el
gran desafío tecnológico de mantenerse
al día con los continuos avances que
se producen en esta área», asegura.
La sargento primero Virginia Gallego, mecánica de avión, forma parte del área de
Sostenimiento y es la única mujer que realiza esta tarea en la fuerza AGS.
SOSTENIMIENTO Y LOGÍSTICA
El área de Sostenimiento de la Fuerza
AGS, además de contar con el coronel
Raimundo como jefe, tiene una buena
representación española, formada por
técnicos de comunicaciones, personal
de abastecimiento y logística, mecánicos
de automóviles y una mecánica de
avión, la sargento primero del Ejército
del Aire Virginia Gallego, que además
es la única mujer que realiza esta tarea
en la Fuerza. La suboficial explica que
la responsabilidad de sostener todo el
sistema AGS recae en la propia Fuerza,
que cuenta con recursos suficientes
para realizar el mantenimiento de
primer nivel. Para el segundo nivel y
cubrir aquellas áreas que excedan sus
recursos, la unidad cuenta con el apoyo
de dos agencias de la OTAN: la de
Comunicaciones e Informática (NCIA,
por sus siglas en inglés) y la de Apoyo
y Adquisiciones (NSPA).
Este sostenimiento es «una labor
delicada», asegura la sargento primero
«debido a la tecnología tan avanzada
que equipa el sistema, tanto en la plataforma
aérea como en el área de comunicaciones
». No obstante, reconoce que
la consecución de la habilitación inicial
para mantener el sistema y la obtención
del certificado de aeronavegabilidad en
el espacio europeo de un avión no tripulado
de las características del Phoenix
han supuesto grandes retos.
Los 20 militares españoles integrados
en la Fuerza AGS no tenían experiencia
previa en un sistema como
este, pero su disciplina, profesionalidad
y permanente disponibilidad han hecho
que su trabajo en Sigonella sea reconocido
y apreciado por el resto de miembros
de la Fuerza.
Nuria Fernández
Diciembre 2020 Revista Española de Defensa 39
EMAD