de titulados superiores como personal técnico y administrativo capaz de llevar adelante este proyecto. En este sentido será crítica en lo que respecta al área de Cuerpos Comunes, mantener e incrementar en lo posible la sensibilidad que hasta ahora ha tenido la Inspección General de Sanidad para proveer el personal tanto médico como de enfermería, necesarios para mantener al CIMA como el Centro de Excelencia que le corresponde. También será necesaria la articulación de una estructura administrativa y de gestión que permita llevar adelante estos objetivos, en concreto la aprobación de una cartera de servicios realista, consecuencia del análisis pormenorizado de los diferentes procesos de coste y estructurada de forma que pueda ser el elemento básico de interacción con el resto de interlocutores tanto Nacionales como Internacionales. La actual aplicación informática de gestión de historias clínicas deberá ser actualizada, pretendiendo que sea un recurso ágil y sencillo tanto para el usuario como para el CIMA centros, enfermerías y médicos de vuelo autorizados para utilizarlo. Además útil, y capaz de gestionar las bases de datos con fines estadísticos, preventivos y de investigación aplicada. Finalmente el CIMA debe afianzar sus relaciones Internacionales, es evidente que la principal interlocución científica, doctrinal y actualizada proviene de nuestros compañeros y aliados de los Centros e Institutos de Medicina Aeroespacial tanto Europeos como Americanos sin olvidar la pujante actividad de países emergentes que están invirtiendo grandes sumas en formación, equipamientos investigación y desarrollo. Estas líneas de actuación fueron desarrolladas en un documento presentado al JEMA y al Ministro de Defensa, en el último trimestre de 2014, en coordinación con la Dirección de Sanidad del MAPER. AÑO 2014: RETOS El CIMA en la Calle Arturo Soria finaliza su actividad el 14 de febrero de 2014, y en un tiempo record de apenas 2 semanas se traslada a las nuevas instalaciones en la BA de Torrejón, dónde inicialmente y desde el día 2 de marzo se pone en marcha el área de reconocimientos médicos, algo crítico con objeto de asegurar la continuidad de la certificación médica de nuestros tripulantes. Especialmente durante el proceso de traslado, el CIMA ha demostrado una enorme capacidad de coordinación, gestión, responsabilidad y compromiso y gracias a su personal, dicho objetivo se cumplió con manifiesto éxito. A partir de entonces, es decir casi desde principios de 2014, la puesta en marcha de las distintas áreas, gestión de nuevos equipamientos, y solucionar los múltiples problemas derivados de la puesta en funcionamiento de unas instalaciones que fueron entregadas en febrero de 2013, han supuesto una cadena de retos sucesivos que con tesón y ayuda se han ido solventando. Como en cualquier edificio nuevo los problemas se identifican con el inicio de su uso y gracias al esfuerzo de nuestro personal de mantenimiento, apoyo de la Base Aérea y facilidades por parte del Servicio Militar de Construcciones. A finales de marzo se traslada la Cámara Hipobárica desde Arturo Soria e inmediatamente se inicia el proceso de instalación y recertificación, que finaliza a finales de julio cuando la empresa ETC hace entrega oficial de la misma y casi de forma REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Junio 2015 541 dossier
REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA 844
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