TEMAS PROFESIONALES
marinera del buque al máximo nivel que, humana y materialmente, pueda
alcanzarse en cada caso al verse sometido a los efectos de los accidentes o de
la acción enemiga, para mantener en todo momento la máxima potencia ofen-siva
del buque» (I. «Conceptos generales; Generalidades»; II. «Objeto funda-mental
»).
La evolución del poder destructivo de las armas y la progresiva dependen-cia
de la tecnología a bordo han ido influyendo en la naturaleza de los enfren-tamientos
navales hasta la actualidad, en la que un único impacto puede dejar
al buque fuera de combate y anularlo para el desempeño de sus cometidos
tácticos, enfatizando la búsqueda de condiciones de superioridad y la reduc-ción
al máximo de la posible exposición a recibir daños.
El escenario actual nos arrastra a una nueva prioridad, la supervivencia del
buque, que pasa por, en primer lugar, evitar la detección, a continuación impe-dir
el impacto y, caso de no ser posible, una vez finalizado el ataque orientar
el esfuerzo conjunto de toda la dotación hacia labores de SI. En consecuencia,
queda sin fundamento esa doble estructura de personal citada, ya que una
estructura única, apoyada por la automatización de sistemas fijos de detección
y extinción, debe poder encargarse de manera sucesiva del combate externo y,
en su momento, del interno.
Ejercicio de Seguridad Interior a bordo del patrullero Centinela.
(Foto: www.flickr.com/photos/armadamde)
124 Enero-feb.