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Teniente coronel Alfonso Ruiz de Oña Rodríguez
Jefe de la I Bandera
Los legionarios de la I Bandera Comandante Franco desplegaban en los campos de Chinchilla para ejecutar el ejercicio
BETA RUSADIR I/21 desde el 9 al 24 de mayo, con el fin de mejorar el adiestramiento y preparación para el combate de
sus ya centenarias compañías, que se organizaron en un Grupo Táctico (GT), formado sobre la base de la I Bandera. Como
no podía ser de otra forma, se contó con la participación de una unidad de apoyo de fuegos (UAF) del RAMIX-32 y de
una compañía de zapadores del RING-8 y con el apoyo de personal y material del resto de unidades de la Comandancia
General de Melilla.
Como era de esperar, los legionarios de la I Bandera trabajaron duro y se esforzaron por continuar siendo dignos sucesores
de sus predecesores, los cuales en estas misma fechas, hace casi ya 100 años, a finales de mayo de 1923, se batían el
cobre en las operaciones cerca de Tizzi Azza y Peña Tahuarda y donde hallaron gloriosa muerte en combate el capitán
Isidro Quiroga Jordá, jefe de la 13ª Compañía de esta Bandera junto a uno de sus oficiales y siete legionarios. Es por ello
que los legionarios de la «Bandera de los Jabalíes», continuando el ejemplo de sus antecesores, siguiendo el camino de
los caballeros, desplegaron en el campo de maniobras y sudaron la verde camisa durante estos días de calor, frío, viento y
lluvia, clima al que nos tiene habituados nuestro querido campo de maniobras de Chinchilla en mayo.
PREPARACIÓN: PLANEAMIENTO Y SIMULACIÓN
Para planear el ejercicio se comenzó coordinando todas
las actividades logísticas, ya que un ejercicio de este
tipo tiene una serie de implicaciones que complican su
ejecución, si se compara con aquellos ejercicios que no
precisan proyectar por mar al personal y material desde
la plaza de Melilla a la península. Una proyección que
implica revistas cinológicas, organización de diversas
columnas y escalones de marcha, embarque de todos los
vehículos en un buque de línea regular y como colofón,
una marcha motorizada de 365 km hasta el CENAD.
Se efectuó una exitosa proyección de en torno a 600
militares y más de 100 vehículos con remolques, que se
ejecutó perfectamente gracias a la entrega y trabajo de los
legionarios y al personal de mantenimiento de la Bandera.
Cabe señalar que, como actividad adicional de preparación
previa, se realizó un ejercicio de puestos de mando asistido
por simulador CPX-CAX, en el CENAD de San Gregorio,
en Zaragoza. En este CPX se desarrolló la misma
operación que posteriormente sería puesta en práctica en
terreno real en Chinchilla. Un ejercicio de una semana de
duración, durante la cual el puesto de mando del grupo
táctico, los jefes de los subgrupos tácticos, el coordinador
de apoyo de fuegos y el jefe de ingenieros que participarían
en el ejercicio, se centraron en coordinar la ejecución y
conducción de la maniobra en los momentos más críticos
de la operación que posteriormente ejecutarían con fuego
real las unidades de combate, junto a los apoyos de fuego
y las acciones de movilidad o contramovilidad.
LA PROYECCIÓN
Llegado el esperado día de la proyección a la península, la cual
fue todo un éxito, el GT desplegó sin mayores novedades con
todos sus vehículos el mismo día de ejecución de la proyección,
aspecto a destacar dada la entidad del ejercicio y el número
de vehículos utilizados. Este éxito no fue debido a la suerte, no
fue debido a la baraka de este Tercio africano, sino al trabajo
constante, profesional y callado de los legionarios y de la Sc.
de Mantenimiento de la Bandera, la cual consiguió una operatividad
prácticamente plena, con un material como el BMR, que
cuenta con varias décadas de sufrido servicio a sus espaldas.
30 555 · II-2021 La Legión