La conjunción de un mundo globalizado
10 / Revista Ejército n.º 955 • noviembre 2020
con relaciones económicas
marcadas por la reducción de costes,
un primado creciente de las tecnologías
que expulsan del mercado
a los menos preparados y unos sistemas
de gobierno que, en clave occidental,
marcan un claro cortoplacismo
electoral, dan como resultado
unas tendencias hacia el cesarismo
populista en la mayoría de los países
que llevan a la aparición de cierto
neofeudalismo, en el que crecientes
capas de población quedan excluidas
del bienestar general o simplemente
pasan a ser dependientes de
los subsidios estatales8. El resultado
de todo ello es una creciente
inestabilidad social, fuente de conflicto
que conlleva enormes riesgos
para la seguridad de los países o de
los bloques como la Unión Europea,
que, además, deben hacer frente
a nuevas amenazas derivadas del
cambio climático, las migraciones
de masas o el riesgo de pandemias.
Sigue habiendo superpotencias
pero estas no parecen tener un control
claro y diáfano, como sucedía a
mitad del siglo pasado. Los recientes
sucesos de los EE. UU. son una
muestra, pero la crisis sanitaria también
ha mostrado conatos de contestación
en la férreamente controlada
China. Las ciudades están en
Aunque sigue
habiendo
superpotencias,
estas no parecen
tener un control
claro y diáfano
como sucedía en
el siglo pasado