También realizamos tiros con munición
de 120 mm y 30 mm y con mortero
pesado de 120 mm en el CT Puig
Amarillo y —sobre todo— en el CT
de Boyero con munición de ejercicio
de Leopard y Pizarro, imprescindible
esto último para validar tanto a
los tiradores como la correcta alineación
de nuestras armas principales
(«puesta a cero»).
Como complemento a la preparación
en vivo, hacemos amplio uso de los
simuladores, que nos permiten instruirnos
y adiestrarnos a bajo coste
(sin gasto de transporte a la península,
de combustible, de munición, etc.)
e incluso adiestrar aspectos difíciles
de realizar en vivo por una unidad pesada
como el combate urbano.
Por otro lado utilizamos ampliamente
el simulador Steel Beasts en Melilla,
que permite desde instruir cada puesto
táctico y las tripulaciones hasta
adiestrar al Grupo al completo, con
apoyos. Dadas las limitaciones físicas
de Melilla para una unidad de
Cohesión
El Grupo de Caballería Acorazado Taxdirt evolucionando en Rostrogordo. Melilla, Abril 2018
84 / Revista Ejército n.º 955 • noviembre 2020
Caballería, resulta una herramienta
muy valiosa.
Además, utilizamos dos ventanas
anuales de los simuladores de torre
(STO) y de Puntería y Tiro (SPT) para
el carro de combate del CENAD San
Gregorio (Zaragoza) que, junto con
los imprescindibles ejercicios de fuego
real en Boyero, permiten validar
puestos tácticos y tripulaciones en el
marco de la «instrucción piramidal»
de los carristas.
En conclusión, la suma de todas esas
actividades de instrucción y adiestramiento,
con la cohesión siempre en
mente, son las que nos acercan a la
excelencia en el combate convencional,
ese «para qué» que perseguimos.
Cosiendo cadena de un carro de combate Leopard 2A4