El último vuelo de los SH3D Sea King
LAS maniobras Flotex 22 han sido el último
escenario operativo para los dos helicópteros
SH-3D Sea King que aún permanecían
en activo. Encuadrados en la Quinta Escuadrilla
de Aeronaves, los populares morsas —indicativo
radio con el que siempre han sido conocidos en la
Armada— hicieron su última toma en la cubierta
de vuelo del Juan Carlos I, cuya dotación, y especialmente
el Servicio de Vuelo, quiso sumarse
también a la despedida.
Pocos días después, el 27 de junio, la Flotilla
de Aeronaves despidió oficialmente a su veterana
aeronave con un acto celebrado en la base naval
de Rota. Estuvo presidido por el Almirante de la
Flota, Eugenio Díaz del Río, y participaron antiguos
jefes y dotaciones de la Quinta Escuadrilla.
MÁS DE MEDIO SIGLO
El 29 de junio de 1966 llegaba a bordo del USS
Independence el que sería denominado Morsa
501. Se trataba del primer SH-3D del mundo en
su versión antisubmarina, prototipo de todos los
que vuelan hoy de esa versión. En total, se incorporaron,
desde 1966 hasta 1981, 18 unidades,
siendo la última de ellas la que cerró la cadena de
montaje de este modelo de helicóptero.
La Armada decidió introducir equipos de alerta
aérea temprana (AEW, Airborne Early Warning)
que protegiesen al Grupo de Combate, y para ello
seleccionó un radar de la firma británica Thorn EMI
Electronics Ltd. utilizado por la Royal Navy en la
guerra de las Malvinas. Se adquirieron cuatro sistemas,
montándose tres en helicópteros modificados
y el cuarto en un contenedor utilizado como banco
de pruebas y simulador.
El 14 de mayo de 1987 se completó la transformación
Pepe Díaz
del Morsa 509 a la versión AEW, lo que
dotó a la Armada de la importante capacidad de
alerta temprana gracias al radar Searchwater instalado
en lo que, cariñosamente, en la Armada se
llaman «paqueteras», debido a su color gris, dado
que en aquella época las morsas aún lucían color
azul. Entró en servicio a principios de 1988. En
2016 se inmovilizaron los tres SHW, comenzando
su proceso de baja y finalizando de esta manera la
vida operativa de las «paqueteras».
El 3 de enero de 2001 finalizó la conversión del
Morsa 515 a la versión de Asalto Anfibio. Se inició
así la transición de su cometido original de guerra
antisubmarina a un nuevo tipo de misión, el asalto
anfibio, para la que el helicóptero multiplicó sus capacidades.
En 2002 finalizó su conversión el Morsa
514 cerrando el ciclo antisubmarino y la Quinta Escuadrilla
de Aeronaves pasó a tener como misión
principal el helitransporte anfibio, contando para
ello con siete helicópteros.
A partir de ese momento, la Quinta Escuadrilla
emprendió un nuevo camino dotando a la Armada
con nuevas capacidades y permitiendo el despliegue
de los morsas a las distintas misiones internacionales
acaecidas desde ese momento en
diferentes partes del mundo.
El 12 de abril de 2013 la Escuadrilla celebró
las 100.000 horas de vuelo, cifra que llegaría a las
106.000 en el momento de su despedida. El 7 de
septiembre de 2020 se incorporaron dos Sikorsky
SH-60F, la primera pareja de un total de ocho unidades
que son el relevo generacional del SH-3D,
cuyas dos últimas unidades causaron baja con el
acto celebrado el 27 de junio en la base de Rota.
Los morsas hicieron
sus últimas tomas en
la cubierta de vuelo del
Juan Carlos I.
Los
veteranos
helicópteros
causan baja
después de
56 años de
servicio en
la Armada
44 Revista Española de Defensa Julio/Agosto 2022