Sebastián-Guerrero M.V., et al.
compuesto por tres redes: la red de atención posterior u orienta-ción,
la red de vigilancia o advertencia y la red anterior o control
ejecutivo. Cada una de estas redes sería responsable de diferen-tes
funciones de atención y, a su vez, se asociaría con diferentes
áreas del cerebro en un trabajo conjunto que también considera
la individualidad del sujeto, incorporando aspectos evolutivos,
psicosociales y emocionales2. La atención puede considerarse
la base fundamental para el desarrollo eficiente de los procesos
cognitivos y el control de la conducta.
Colmenero et al.3 definen la atención como un mecanismo
central de control del procesamiento de la información, que
actúa de acuerdo con los objetivos del organismo mediante la
activación e inhibición de procesos. También puede orientarse
hacia los sentidos, las estructuras del conocimiento en la memo-ria
y los sistemas de respuesta.
El primer requisito para las personas que realizan tareas
que pueden ser monótonas es la vigilancia mantenida o la
atención sostenida. Así, el estudio de la atención y la pérdida
de la misma durante la realización de diferentes tareas es un
tema de interés actual desde el punto de vista neurológico4, ya
que constituye el requisito previo para otros procesos cogniti-vos
complejos. El estudio de la atención durante la ejecución
de diversas tareas mentales se vuelve más importante cuando
se analiza durante el desempeño de tareas por parte del per-sonal
militar5, en el sector de la salud o en la industria o en
aquellos casos en que la disminución de la vigilancia podría
tener consecuencias peligrosas tales como accidentes, pérdida
de vidas, etc.
La conducción de vehículos militares requiere una especial
atención/concentración, ya que se realiza a la vez que otras
tareas tácticas militares6, como monitorear las comunicaciones
o discriminar posibles objetivos enemigos7. Todo esto unido a
la orografía del terreno en el que se lleva a cabo la conducción,
no siempre fácil, hace que los conductores militares tengan que
lidiar con situaciones que requieren de máxima concentración y
se vean sometidos a una posible sobrecarga atencional8,9.
Lu et al10 analizan la carga de trabajo durante la conducción
de un vehículo de ruedas multipropósito de alta movilidad simu-lado
mientras se realiza una tarea de memoria. La sobrecarga de
la tripulación de un carro de combate en escenarios típicos de
conflicto, dotado de nuevas tecnologías, ha sido estudiada por
Mao et al11.
El estudio de la actividad bioeléctrica cortical mediante el
electroencefalograma (EEG), permite analizar las sobrecarga,
atención y concentración requeridas durante la realización de
tareas de conducción o simulación de estas. Los dispositivos
modernos de electroencefalografía, más ligeros y portátiles, per-miten
la recopilación de registros EEG en todo tipo de escena-rios.
Para el análisis del EEG se pueden utilizar algunas de las
técnicas con representaciones de frecuencia de tiempo, como la
Transformada rápida de Fourier o la Transformada de Fourier
de tiempo reducido, que muestran la evolución temporal de las
características espectrales de la señal. El análisis del EEG puede
ampliarse mediante la aplicación de cuantificadores de la diná-mica
no lineal, técnicas fractales y nuevos métodos espectrales12.
Por ejemplo, la dimensión de correlación ha sido utilizada por
Yang et al.13 para medir los cambios en la actividad cerebral en
el registro de varios tipos de EEG.
82 Sanid. mil. 2021; 77 (2)
Nuestro grupo ha propuesto métodos analíticos y compu-tacionales
avanzados para obtener cuantificadores del EEG
(de tipo espectral y fractal) que asignan valores numéricos al
sistema observado y permiten establecer comparaciones entre
diferentes EEG y diferenciar los estados cerebrales corres-pondientes
a los procesos mentales. Estos han sido aplicados
al estudio de la atención en niños con trastorno de déficit de
atención e hiperactividad (TDAH) durante la realización de
diferentes tareas14-15.
El neurofisiólogo B. Hjorth en 1970 definió un conjunto de
parámetros utilizados como herramienta clínica en la descrip-ción
cuantitativa del EEG16, denominados: Actividad, Movi-lidad
y Complejidad. Estos cuantificadores se conocen como
parámetros de Hjorth o descriptores de pendiente normalizados,
y describen una señal en el dominio del tiempo y la frecuencia .
En este trabajo se utiliza la Movilidad con el objetivo de
estudiar las variaciones en la complejidad numérica bioeléc-trica
cortical de un grupo de sujetos de las Fuerzas Armadas al
pasar de estados de reposo a tareas de simulación de conduc-ción
de vehículos militares, y con la dificultad de la tarea. La
Movilidad se considera una medida de la desviación estándar
de la derivada de la señal en referencia a la desviación están-dar
de la amplitud. Es un estimador de la frecuencia media de
la señal que describe de manera global el contenido espectral
del registro, aumentando cuando la frecuencia media aumenta,
y disminuyendo en otro caso. Se ha demostrado en trabajos
anteriores, que es un buen indicador de la actividad cerebral,
variando en las áreas involucradas en el desempeño de diversas
tareas de simulación15,17.
MATERIAL Y MÉTODOS
El estudio está en concordancia con la Ley de Investigación
Biomédica (Ley 14/2007, de 3 de julio de investigación biomé-dica)
y con la Declaración de Helsinki. El protocolo de investi-gación
y el consentimiento informado fueron aprobados por el
Comité Ético de Investigación Clínica de la Inspección Gene-ral
de Salud de la Defensa. Cada participante firmó su corres-pondiente
hoja de información del paciente y el consentimiento
informado antes de las pruebas.
Sujetos y diseño experimental
Se solicitó la participación voluntaria de 40 sujetos entre
los Caballeros y Damas Cadetes alumnos de primer curso de la
Academia General Militar, y de Oficiales y Suboficiales de dicha
Academia y del Hospital General de la Defensa de Zaragoza.
La muestra incluyó individuos diestros sin antecedentes neuro-lógicos
y que no tomaban medicación crónica, sin antecedentes
de daño cerebral, problemas de visión o dificultades de apren-dizaje.
Se seleccionaron 36 sujetos (25 hombres y 11 mujeres)
cuyas señales EEG estaban libres de artefactos. La edad media
del grupo fue de 31.44 (± 13.05).
Las señales EEG analizadas fueron recogidas en el Hospital
General de la Defensa de Zaragoza. Para cada sujeto, se registra-ron
6 tipos de señales EEG de 3 minutos de duración en reposo y