fuerzas armadas
Dos de los cinco pilotos de la unidad de Cuatro Vientos certificados para volar el nuevo helicóptero
del Ejército del Aire delante del primero de los aparatos, recibido el pasado mes de octubre.
AMANECE Madrid frío y
lluvioso un día de diciembre.
La pista mojada de
la base aérea de Cuatro
Vientos devuelve la imagen invertida,
como un espejo, del primer helicóptero
NH90 de Búsqueda y Salvamento
(SAR) del Ejército del Aire momentos
antes del despegue. Su reflejo sobre el
pavimento es un buen presagio para la
tripulación, deseosa de poner a prueba,
una jornada más, las capacidades de la
nueva aeronave polivalente diseñada y
construida para operar en todo tiempo.
Dentro de la cabina, a través del
cristal empapado, los pilotos contemplan
la figura desenfocada del mecánico
que les da las indicaciones para
el despegue. Durante casi dos horas,
los capitanes Antonio y Jesús del 803
Escuadrón SAR se alternarán como
comandante de aeronave y segundo
surcando el noroeste de la comunidad
autónoma madrileña. Lo harán «pinchando
nubes» en vuelo instrumental
sobre la zona de Torrelodones y, al llegar
a las estribaciones de la sierra, sobre
el embalse de Valmayor, realizarán
tráficos a baja altura y tomas tácticas
entre densas brumas, como si se tratara
de recuperar a un piloto derribado o
a los miembros de un equipo de operaciones
especiales tras una incursión en
zona hostil.
«Lluvia persistente, niebla, nubes
bajas, engelamiento…». De regreso al
aeródromo, el capitán Jesús contabilizaba
las inclemencias meteorológicas
que condicionaron el vuelo de adiestramiento.
«Gracias a la meteo complicada
hemos podido cumplir muchos
requisitos del entrenamiento», añade el
capitán Antonio, «con la tranquilidad y
la seguridad que ofrece esta aeronave»,
asegura el oficial, entusiasmado con el
comportamiento del NH90.
Lejos de haber supuesto una contrariedad,
la meteorología adversa para
el vuelo en helicóptero fue durante las
últimas semanas del pasado año un
estímulo para los pilotos, mecánicos,
ingenieros e informáticos del 803 Escuadrón
seleccionados para lanzar el
nuevo helicóptero del Ejército del Aire.
Los HD.29 —su denominación militar—
sustituirán a los veteranos AS332
Super Puma (HD.21) que, desde principios
de los 80, operan como plataforma
SAR, de aeroevacuación médica (MEDEVAC,
por sus siglas en inglés), de
recuperación de personal (PR, Personal
Recovery) en ambiente hostil y de operaciones
aéreas especiales (SAO, por su
acrónimo en inglés).
La entrada en servicio del NH90
en la unidad madrileña —previsiblemente
para 2022, cuando se alcance la
capacidad operativa final— supondrá
«un salto cualitativo en el ámbito de
los sistemas de ala rotatoria», afirmaba
en estas mismas páginas el jefe de
Estado Mayor del Ejército del Aire,
Javier Salto, a pocos días de recibir
el primer aparato. El 803 Escuadrón
trabaja ya con dos NH90 —el primero
llegó el 14 de octubre y, el segundo,
el 4 de diciembre—. En los próximos
meses Airbus Helicopters entregará
las cuatro aeronaves que completan la
primera serie de seis helicópteros, a la
que seguirá otra más de media docena
de aparatos.
La entrada en
servicio de la
nueva aeronave
está prevista para
el año 2022
Febrero 2021 Revista Española de Defensa 35