nacional
El jefe de Estado Mayor se propone trabajar por la
modernización y la mejora en la formación del personal
contrastadas por su labor en los cuarteles
generales, en el apoyo logístico o
a bordo de los buques y aeronaves que
las autoridades decidan, desplegadas
cualquier día del año en operaciones
tanto en el exterior como en el territorio
nacional».
El AJEMA explicó que, hasta hace
muy poco, los objetivos estaban claramente
establecidos en las líneas generales
de la Armada, aprobadas en
2017 y actualizadas en 2019, pero la
pandemia «ha golpeado España con la
fuerza de un huracán y sus consecuencias
nos afectan a todos, individual y
colectivamente». «Vivimos tiempos de
austeridad y sacrificio, y la Armada
no es ajena a ellos», observó Antonio
Martorell, quien señaló que se están
maximizando los recursos para poder
cumplir los compromisos asignados
por el Gobierno.
El jefe de Estado Mayor de la Armada
propugnó el impulso a los proyectos
de transformación e innovación;
el adiestramiento y la preparación de
las unidades en base a los escenarios;
la mejora en la formación del personal,
con especial atención a la trayectoria
profesional, para elevar «la moral y el
bienestar»; y el incremento de las retribuciones.
«Siendo la política de defensa una
política de Estado —añadió—, mi
deseo sería que fuéramos capaces de
lograr, o al menos dejar encauzada,
una política de estabilidad presupuestaria
que permita una adecuada planificación
y un empleo óptimo de los
recursos asignados. Este acuerdo lo
demanda nuestra posición estratégica
y nuestros compromisos con las organizaciones
internacionales de las que
formamos parte».
PROYECCIÓN EUROPEÍSTA
«Almirante, lleva usted muchos años
trabajando por la Armada, y quien trabaja
por la Armada, trabaja por España
», le dijo la ministra de Defensa en su
alocución. Margarita Robles destacó
la «proyección europeísta» de nuestro
país y explicó que la labor desempeñada
por el almirante general Martorell al
frente de la operación Atalanta de la UE
había sido uno de los factores determinantes
para su elección como AJEMA.
Según Robles, «España quiere jugar, y
jugar fuerte, en la Unión Europea y en
la OTAN».
Asimismo, Robles advirtió que el
nuevo AJEMA hereda del anterior
«una Armada moderna, preparada y
dispuesta» y se refirió a la celebración
del V Centenario de la primera circunnavegación
de la Tierra, donde se puso
de relieve «el valor y el ingenio» de los
marinos.
La titular de Defensa tuvo un recuerdo
para todas las víctimas del terrorismo,
que quiso personificar en la
figura del vicealmirante Fausto Escrigas
Estrada, ex director general de
Política de Defensa, asesinado en 1985
por ETA. Aseguró que se siente «muy
orgullosa de la Armada y de España,
que tiene una de las democracias más
avanzadas del mundo, con unas instituciones
sólidas y unos derechos y libertades
que son la mejor garantía de
la democracia».
Santiago Fernández del Vado
Marzo 2021 Revista Española de Defensa 7
MDE
42 años en la Armada
Bilbaíno, de 60 años, Antonio Martorell
fue uno de los jóvenes que,
como recordaba en su alocución, cruzaron
«llenos de sueños e ilusiones»,
en el ya lejano 16 de agosto de 1979, la
puerta de Carlos I de la Escuela Naval
Militar, de Marín. Cinco años después,
en 1984, recibió el despacho de alférez
de navío.
El ahora AJEMA es diplomado de
Estado Mayor y especialista en Armas
Submarinas, y ha realizado numerosos
cursos nacionales e internacionales.
A lo largo de su carrera ha sido
comandante del dragaminas Miño, el
cazaminas Turia, la 1ª Escuadrilla de
Medidas Contraminas (MCM), la Agrupación
Permanente MCM número 2 de
la OTAN y el buque de asalto anfibio
Galicia. En Estados Mayores a flote fue
jefe de órdenes de la 2ª Escuadrilla de
Dragaminas y de la 21ª Escuadrilla de
Escoltas.
Entre los destinos en tierra, Martorell
fue profesor de la Escuela Superior
de las Fuerzas Armadas (ESFAS) y
jefe del Taller de Torpedos del Arsenal
de Cartagena, del área de la Unión Europea de la DIGENPOL y de la sección de
Ejercicios del Cuartel General Conjunto de la OTAN en Nápoles. Además, estuvo
destinado en tres ocasiones en el Estado Mayor de la Armada.
Tras su ascenso a contralmirante mandó la División de Logística del Estado
Mayor de la Armada y el Grupo de Acción Naval 2, y fue nombrado almirante
de Acción Naval. Como vicealmirante fue designado comandante operativo del
Cuartel General Operacional de la Unión Europea (ES EU OHQ) en la base de
Rota, comandante de la operación Atalanta contra la piratería en el Índico y del
Cuartel General Marítimo de Alta Disponibilidad; y como almirante mandó la Flota.