Herrera-de-la-Rosa A.
bién en 1981 se instaló la Sección de Hemodinámica y Angiografía
y se inició el montaje y pruebas del Ordenador General.
En 1982 comenzó a funcionar la Escuela de Enfermería,
dependiente de la Universidad Complutense. El 6 de junio se
entregó el Pabellón de Presos y Arrestados. Más adelante, en
1988, al no permitirse tal separación, se instaló allí el EMATC(
20).
Los días 22, 23 y 25 de junio hubo huelga del personal
laboral. Noticia curiosa que añado para apuntillar que ya
había llegado la modernidad(21).
En 1984 se trasladaron, del Hospital del Generalísimo,
los Servicios de Oncología Radioterapéutica y el de Medicina
Nuclear. Se inauguró el Vestíbulo del Hospital y se pudo
entrar por la puerta principal. En este vestíbulo se situó el reloj
que había estado en el edificio antiguo y estuvo a punto de ser
vendido como chatarra. Se colocó en una urna acristalada y
su reparación fue obra de Pedro Portellano, el Jefe de Cirugía
Vascular y excelente aficionado a la relojería antigua.
En 1985 los Servicios de Radiología y Estomatología pasaron
a sus nuevas instalaciones. En este año y en los siguientes
se realizaron importantes reuniones de investigación.
Al final de los años ochenta, con motivo de la Guerra entre
Irak e Irán, se recibieron enfermos con lesiones en ojos y vías
respiratorias achacadas a la acción de gases tóxicos supuestamente
disparados por el Ejército Irakí. Yo estaba de guardia
en uno de esos ingresos y me tocó tratar a estos civiles, que los
iraníes habían enviado a Hospitales Europeos para apoyar sus
protestas ante la ONU.
En 1990 el Ministerio de Defensa decidió contratar un sistema
informático, común para todos los Hospitales Militares,
que se le adjudicó a la Empresa de Estados Unidos SMS. El
Plan Malta(22).
(20) El Equipo médico avanzado del Ejército de Tierra de la zona Centro,
estuvo en este edificio y relazó misiones en el Extranjero y en Territorio
Nacional. Estando yo de Director accidental en los últimos meses de este
siglo me tocó despedirle cuando se disponía a partir a una de sus misiones
y sentí la emoción ajena al comprobar la ilusión de los que partían a realizar
la verdadera actividad de sanitarios militares. Su Jefe era el Teniente
Coronel Guiote, que como era de prever acabó siendo el General Médico
Jefe de la Brisan. En la actualidad la Función Logística del Hospital es la
de constituir un cuarto escalón. (Role-4).
(21) Pongo aquí la irónica «llegada de la modernidad» con la convicción de
que todo impacto novedoso precisa aprendizaje. En un principio consideré
que las reivindicaciones del personal civil iban mal dirigidas. El
«patrón» objeto de su actitud estaba en la lejanía del Ministerio al que
chillaban, mostrando pancartas. También me chocaba la injusta agresividad
de los líderes sindicales en la Reuniones autorizadas. Reuniones a las
que los médicos, en las guardias de Jefe de Hospital, teníamos que asistir,
en los diversos turnos, con misión exclusivamente testimonial. Cuando
ocupé puestos de Dirección entendí que nuestra misión no era la solución
de la protesta, sino una apelación a la flexibilidad laboral, que pudiese
tener nuestra autoridad. Cuando más adelante, siendo Segente del Hospital,
me dijo una sindicalista liberada, que yo, al menos, les comprendía,
cosa que antes nunca me hubieran dicho, comprendí que todo necesita
aprendizaje.
(22) Para preguntarse sobre este asunto lo mejor es tener una conversación
con José Alfonso Delgado. El Proyecto Malta me lo explicó así: Fue
el primer intento a nivel nacional, junto con el proyecto HP-HIS del
Insalud de desarrollar un SIH (Sistema de Información Hospitalaria)
para el conjunto de la Red Hospitalaria de Defensa. Durante 1985 a
1987, tres años costó elaborar el Pliego de Prescripciones Técnicas y sacar
el concurso público que se adjudicó a la Empresa Share Medical
56 Sanid. mil. 2021; 77 (1)
En 1991, terminadas las obras del Pabellón de Hematología
y Hemoterapia, se trasladó al mismo, el Servicio Central
de los tres Ejércitos, que hasta entonces se encontraba en el
Hospital Militar del Generalísimo.
Desde el año 1972, que se redactó el anteproyecto, hubieron
de trascurrir 20 años para que en 1992, se pudieran determinar
finalizadas las obras del Hospital.
Al año siguiente, el 4 de marzo de 1993, SSMM los Reyes
D. Juan Carlos y Dª Sofía, visitaron oficialmente el Hospital,
86 años después de que lo hicieran SSMM los Reyes D.
Alfonso XIII y Dª Victoria Eugenia.
Era Director el General D. Jesús González Lobo, que luego
fue el primer Inspector General de la Defensa tras la creación
de los Cuerpos Comunes, que dio lugar a la unidad de la Sanidad
Militar de los tres Ejércitos. Esta unificación no afectó, de
momento, a la Historia de este Hospital.
En 1996 el Hospital cumplió cien años, siendo su Director
el General D. José María de la Torre Fernández, que presidió
el comité que celebró los actos del Centenario del 20 al
27 de junio. Los Reyes D. Juan Carlos y D.ª Sofía inauguraron
estos actos. Tuvo especial relevancia la Recepción que se hizo
en el antiguo Pabellón de Dirección, que se conserva como
testimonio del pasado. En la antigua Sala de Juntas, presidida
por el retrato de Isabel II, que ya comenté, se les mostró a
los Reyes la Placa de mármol y bronce, homenaje a los caídos
del Cuerpo, inaugurada por SS MM D. Alfonso XIII y D.ª
Victoria Eugenia en 1910. En la Biblioteca Histórica(23), con
libros y Revistas de los siglos XVIII y XIX, los Reyes firmaron
en el Libro de Honor. Desde el Pabellón Histórico marcharon
a la entrada y descubrieron un monumento conmemorativo
del centenario. En el salón de actos se pronunciaron sendos
discursos del Inspector General de Sanidad y del Director del
Centro, a los que contestó el Rey con un mensaje de aliento y
ánimo.
En días sucesivos se celebraron diversos actos. Especialmente
emotiva fue la participación del Profesor Laín
Entralgo recordando la figura del Doctor Gómez Ulla, cuyo
sillón de la Real Academia de Medicina ocupó a la muerte del
gran cirujano militar.
El Hospital que iniciaba su nueva andadura tenía función
asistencial, pericial, docente, investigadora y logística.
Systems® (SMS) y su sistema Action 2000 comenzando con el Hospital
del Aire y siguiendo por los Hospitales Militares de Sevilla, Naval de
Cartagena y finalmente el Hospital Militar Gómez Ulla en el que tuvimos
que efectuar una difícil migración de sistemas, dado que su Sistema
Mapper® dirigido por el Teniente Coronel D. Ricardo Salazar funcionaba
bastante bien.
(23) Esta Biblioteca forma parte del Museo actual de Sanidad Militar, que en
esta ocasión estaba sólo iniciado con esta presentación histórica. No obstante,
ya se estaban recogiendo todos los fondos históricos de los Hospitales
Militares que se fueron cerrando. Esta ardua tarea, que consistía en
acudir a esos centros y señalar muebles, libros, cuadros y demás objetos
de interés, estuvo a cargo de D. Ricardo Muro, primer jefe del Servicio de
Inmunología del Hospital, que fue General Director del Hospital, y que
dados sus conocimientos en museología, fue fundador y primer Director
de este Museo, donde ha realizado varias exposiciones temporales y al
que sigue dedicado de forma altruista y eficaz, catalogando objetos, instrumental
médico y libros.