Historia y Patrimonio
HISTORIA
se convirtió en el arma principal, empleado de muy diversas maneras. Las unidades alemanas,
siguiendo la táctica marcada por Liddell Hart, fueron las que organizaron sus unidades blindadas y
aplicaron un tipo de maniobra -Guerra Relámpago- más próxima a la filosofía de la caballería.
En el otro extremo tenemos la filosofía francesa o soviética con el empleo de los carros en masa,
buscando el efecto psicológico como los cruzados en la edad media y olvidando la maniobra, la
búsqueda de los puntos débiles del frente, los flancos o la retaguardia.
Durante la Guerra de Vietnam surgiría otro posible caballo de batalla, un medio que aportaba
una gran movilidad, velocidad y potencia de fuego, el helicóptero. La 1ª División de Caballería de
los EEUU fue reconvertida en una unidad aeromóvil, cosechando grandes victorias y alguna derrota
como la Operación Delaware en mayo de 1968.
Una vez finalizada la Guerra Fría y alejada la amenaza acorazada soviética, los jinetes se verían
envueltos en otra decisión transcendental para el Arma: ruedas o cadenas.
Y AHORA… ¿APOYO AL COMBATE?
El entorno operativo cambiante en el que se desarrollarán los futuros conflictos, el espacio de
batalla vacío y no lineal y el enfrentamiento de alta intensidad contra adversarios tecnológicamente
avanzados, han creado una tendencia que busca la especialización del Arma de Caballería en el
reconocimiento, dejando a un lado la seguridad o el combate propio del Arma. Tal es el caso del
Ejército Alemán, que ha reorganizado sus unidades orientándolas al mundo ISTAR (inteligencia,
vigilancia, reconocimiento y adquisición de objetivos).
Por otro lado, la tendencia actual en los ejércitos de referencia es la de «muscular» a sus unidades
de caballería dotándolas de una mayor capacidad de enfrentamiento que les permita combatir
para obtener información, proporcionar seguridad y realizar otras acciones ofensivas o defensivas
que se ajusten a sus características, dejando a un lado las tendencias que apostaban por una caballería
de sensores y antenas, para poder actuar en el amplio espectro del conflicto. En esta línea se
encuentran los ejércitos de Francia, Reino Unido, EE. UU., Italia y España.
La conclusión de todas estas «transformaciones» que ha tenido que llevar a cabo el Arma de Caballería
es que, a diferencia del batallón de infantería que adquiere su personalidad con el vehículo con el
que están dotadas sus unidades de combate, las unidades de caballería, independientemente del material
o cometidos asignados, se caracterizan por un espíritu hecho de audacia y abnegación, de sacrificio
y disciplina, el cual no cambiará nunca porque es el alma misma de los jinetes y el alma es inmortal.
Memorial de Caballería, n.º 89 - Junio 2020 105
BIBLIOGRAFÍA
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