13422 Puerta de Toledo

HISTORIA MILITAR DE LA GUERRA CIVIL EN MADRID - FUENTES PRIMARIAS -

La Puerta de Toledo MV. La Puerta de Toledo era el corazón de una zona fuertemente fortificada y militarizada, de la ribera izquierda del Manzanares, que funcionaba como una segunda línea de defensa del frente. Esta Puerta controlaba la Glorieta de las Pirámides y ésta, a su vez, los accesos por el Puente de Toledo de las carreteras de Carabanchel, Toledo y Cádiz. La Puerta también controlaba el Paseo de los Pontones, el posible acceso desde la Pradera de San Isidro por el Pontón de San Isidro. La Glorieta de las Pirámides, según el informe de Vicente Rojo de diciembre del 36, tenía ya una potente fortificación: Consta de dos cinturones de parapetos con un total de 600 metros y tres casetas para la guardia. Varios nidos de ametralladoras completan la defensa de esta Plaza (véase croquis). La Glorieta de las Pirámides, además de los Fortines y de sus grandes defensas estaba también protegida por el gran parapeto contínuo del Manzanares, de dos metros de espesor, paralelo al rio y junto a sus pretiles, y, como cabeza del Puente de Toledo, contaba con refugios, emplazamientos de piezas, polvorines e, incluso, con un Hospital comunista. La Puerta de Toledo disponía de enlaces interiores, paralelos al río, de gran capacidad, desde la Glorieta de la Pirámides, a través del Paseo de las Yeserías con Legazpi y de Nicolás Estébanez (hoy, Paseo Imperial) con la calle Segovia. Las vías de evacuación eran posibles por la Ronda de Toledo (Embajadores) y por la Ronda de Segovia (Cuesta de la Vega). Estaba fortificada la rampa de la calle Toledo y la glorieta de la Puerta de Toledo que contaba con una doble zanja antitanque, de 1 metro de ancha, antes de la Puerta si se viene del río, y que disponía de una galería subterránea en mina, de 10 metros de profundidad, bajo la Puerta para poder volar el monumento, en caso de avance enemigo. En los tres arcos del monumento, parapetos cerrándolos. Todas las calles que enlazan con la Glorieta estaban cortadas por parapetos y barricadas. La Ronda de Toledo, tanto al principio como a su terminación, contaba con parapetos que la cerraban; así como todas sus calles transversales. Entre la Puerta y el Puente se habían levantado dos grandes Barricadas transversales, de adoquines con cemento, en el cruce de Santa Casilda con la calle Toledo. Las calles fortificadas con abrigos para ametralladora y troneras en los muros. El Paseo de las Yeserías contaba con fortificación, a todo su largo, con caminos de comunicación con el río a través del Parque de la Arganzuela. Esta trinchera, con refugios, comunicaba con retaguardia por pasos subterráneos; en esta zona estaban enclavados muchos refugios contra bombardeos. La zona, inmediata a la Puerta, disponía de varios cuarteles y edificios de uso militar: - El Cuartel de la Guardia Nacional Republicana (GNR) en la calle Toledo, el más importante, en el lado de los pares y antes de llegar a la Puerta, bajando hacia el rio. - El cuartel de la iglesia de la Paloma, cuya torre era observatorio militar. - Cuarteles en el eje de la calle Toledo: en el nº 122 (Taller y Armería), en el nº 136 (cuartel) y en los números 152 y 154 (Puesto Sanitario). - Cuartel de Policía, en el Paseo del Canal, frente a la calle Ercilla. - Cuartel de las Milicias Confederadas, en el lado de los pares de la calle de Toledo, rebasada la Puerta en dirección al rio, en el edificio de “Fundiciones Librero”. FUENTES PRIMARIAS No está permitida la reproducción total o parcial de este documento por ningún medio, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright 89

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