utilizar gran variedad de metales,
plásticos, cerámicas y resinas, es
posible combinarlos para obtener
composites y beneficiarse de las
propiedades de ambos.
• Aplicaciones disruptivas. En construcción,
tales como crear fortificaciones
con una especie de encofrado
rápido. En el campo de las
municiones, fabricar a demanda
cargas de proyección para controlar
su composición y forma en
cohetería. En electrónica, imprimir
circuitos con una misma máquina
utilizando un polímero base y plata
como material conductor.
• Buena adaptación al mundo militar,
donde se suelen encontrar
sistemas con muchas piezas distintas
pero en poca cantidad, y en
ocasiones no comerciales. Este
último aspecto, unido a los largos
ciclos de vida del material, puede
llevar a la obsolescencia y la falta
de proveedores.
Como todo, la fabricación aditiva también
50 / Revista Ejército n.º 959 • marzo 2021
presenta aspectos menos positivos.
Entre sus limitaciones podemos
citar las siguientes:
• Pérdida de competitividad en grandes
series. Una vez lanzada la producción,
las tecnologías convencionales
suelen ser más rápidas y
competitivas en costes. Además,
las materias primas para fabricación
aditiva son más costosas que
para la fabricación tradicional.
• Repetibilidad de características en
algunas tecnologías. En ocasiones
se presentan problemas relacionados
con la homogeneidad en características
mecánicas, tolerancias y
acabados de las piezas finales. La
precisión obtenida en las máquinas
convencionales de control numérico
es en general un orden de magnitud
superior al de las de fabricación
aditiva, aunque con algunas
tecnologías esta distancia se está
acortando.
• Poco volumen de trabajo. Las dimensiones
de las piezas fabricadas
están condicionadas por el tamaño
de las máquinas y su espacio de
trabajo.
• Complejidad de trabajo con las tecnologías
más interesantes. Necesidades
de formación que van más
allá de explicar las particularidades
de un método de fabricación novedoso.
En relación con la prevención
de riesgos laborales, por ejemplo,
cuando se quiere trabajar con polvos
metálicos hay que conocer los
riesgos que conlleva y las mejores
prácticas para evitarlos. El manejo
del software de ingeniería inversa y
del propio CAD requiere personal
especializado. En cuanto al trabajo
con las impresoras, es muy importante
valerse de la experiencia acumulada
por los profesionales que
llevan más años en contacto con
las máquinas.
• Necesidad de posproducción. La
mayoría de piezas requieren un
mecanizado final o retirada de soportes
y polvo superficial.
• Falta de estandarización y de test
de calidad definidos. Se han citado
antes las experiencias BDR, que
suponen el inicio de pruebas en
campo dentro del ámbito militar.
Como ejemplo de la falta de unidad
de criterios en cuanto a las piezas
obtenidas, existen dos corrientes
entre países: una apuesta por mantener
las piezas fabricadas para el
servicio permanente y otra apuesta
porque esas piezas solo sirvan para
salvar la situación y se sustituyan
más tarde, al tener acceso a un repuesto
original.
• Dificultad a la hora de realizar el
planeamiento sobre qué tecnologías
utilizar por estar actualmente
en constante evolución. Esto sería
una traba en el sentido de intentar
aprovechar todas las posibilidades
futuras de la fabricación aditiva.
ORGANIZACIÓN EN EL MALE
Maximizar el aprovechamiento de estas
técnicas con los recursos humanos
y materiales disponibles requiere
organización. Para estructurar y normalizar
todo el impulso que se quiere
dar a la fabricación aditiva y sustractiva
dentro del MALE, en julio de 2019
se aprobó la «Guía de fabricación
Circuito electrónico obtenido por fabricación aditiva