unidades en la Operación Balmis dosier 785
El personal desplegado para realizar las misiones encomendadas
ha sido en su gran mayoría de la especialidad
de Seguridad, Defensa y Apoyo, más conocido en el ámbito
OTAN como force protection. Dicho personal, si bien
posee la formación y capacidades técnicas y logísticas
adecuadas en materia de protección a la fuerza para liderar
las patrullas establecidas para la misión, necesitó del
apoyo incondicional de personal de otras especialidades.
Su misión principal es la de dar protección al personal
y a los medios desplegados tanto en misiones como en
los distintos ejercicios en los que participa el GRUMOCA
contra enemigos reales. Ahora tocaba proteger a los ciudadanos
de un enemigo invisible pero muy real.
Diariamente, la jornada comenzaba con una reunión
previa al despliegue del personal designado para la realización
de la misión, donde se estudiaban en profundidad
las áreas en las que realizarían sus cometidos en la localidad
o localidades asignadas para ese día. Así mismo, y
previo al despliegue, se hacían las coordinaciones necesarias
con las FCSE responsables en materia de seguridad
de dichas localidades (Guardia Civil o Policía Nacional).
Una vez finalizada la reunión, el personal se dedicaba a
la preparación de vehículos, comunicaciones, equipos de
protección individual, así como cualquier otro elemento
imprescindible para la realización de una jornada que, en
el fondo, era una misión en sí misma, debido a las particularidades
de cada área o localidad.
Ya en la localidad, y asignados los cometidos a cada
patrulla en coordinación con las FCSE, el personal iniciaba
su jornada siendo conscientes de la importancia de su
labor y lo que representaba su presencia en las calles por
cuanto la imagen que se transmitía no solo era la del Ejército
del Aire, sino la de las Fuerzas Armadas en su conjunto.
Los miembros de la unidad realizaron su trabajo con
una eficacia absoluta, sintiendo realmente la utilidad de
su contribución y su parte de responsabilidad en la contención
del virus.
Para esta unidad, no son muchas las ocasiones en las
que se ha tenido la oportunidad de realizar actividades
en contacto directo con la población civil, debido a la tipología
revista de aeronáutica y astronáutica /octubre 2020
de las misiones encomendadas, orientadas a proporcionar
medios de mando y control y comunicaciones.
Pero esta nueva misión ha calado hondo entre los nuestros,
ya que han podido comprobar de primera mano el
respeto y admiración que la propia sociedad tiene para
con sus militares por la profesionalidad demostrada durante
el desempeño de su trabajo.
Son muchas las anécdotas y situaciones curiosas que
podríamos destacar durante el desarrollo de la misión.
Quizá una de las más destacada sea la gran cantidad de
personas, en su mayoría mujeres de avanzada edad, que
ofrecían a nuestro personal algún tipo de tentempié para
hacer más llevadera la jornada, unas veces simplemente
agua o algún refresco, y otras el típico dulce casero que
amablemente insistían en que aceptáramos en señal de
agradecimiento a nuestra labor y muestra de su también
participación en la misión. En cierta ocasión, una patrulla
identificó a una persona mayor cuya actitud denotaba
una desorientación anómala, procediendo a solicitarle
información, llegando a la conclusión de que podría padecer
pérdida de memoria. Se procedió a dar aviso a la
Policía Nacional, que informó a nuestra patrulla de que
tenían un aviso de la desaparición de una persona mayor
con alzheimer que coincidía con las características descritas.
Nuestro personal esperó la llegada de la patrulla de la
Policía Nacional y estos, tras felicitar a los nuestros por su
labor, acompañaron al anciano al domicilio familiar para
reunirse con los suyos, lo que sin duda supuso una gran
satisfacción para el personal del GRUMOCA.
No faltaron tampoco los aplausos espontáneos de todo
un vecindario desde sus balcones y terrazas al paso de