mantenimiento y sostenibilidad dosier 1013
del T.12, en la Sección de Ingeniería de la Maestranza Aérea
de Madrid. «Son 31 años con el T.12 a cuestas, desde
las hojas de ruta de las primeras revisiones generales de
aviones Serie 100 en esta maestranza, realizadas en word
perfect en un ordenador XT y una impresora de agujas
hoja por hoja, hasta casi 400, hasta las revisiones de ocho
años + 3600 horas de vuelo de los aviones de aduanas
con todos los intervalos de mantenimiento incluidos en
su programa de mantenimiento en formato de libro de
revisión, que es generado por una aplicación específica,
desarrollada por personal de ingeniería informática,
altamente cualificado en el desarrollo de aplicaciones a
requerimiento de los talleres de la Maestranza Aérea de
Madrid». Una vida dedicada por entero a mimar el mayor
éxito de la industria aeronáutica española.
Nos cuenta que en el mantenimiento de las aeronaves
militares del siglo XX, los fabricantes consideran necesario
realizar una revisión en profundidad de
la aeronave, con inspecciones más específicas
y tareas más complejas que las que se
realizan en las unidades que las vuelan. En
la Maestranza Aérea de Madrid, el proceso
de la revisión mayor de los T.12 implica
diferentes fases de trabajo, la primera fase
es la recepción del avión, SEPEV realiza las
pruebas en tierra necesarias para comprobar
el funcionamiento de los sistemas del
avión, también se comprueban qué elementos
hay que cambiar por cumplimiento
por horas de vuelo o por tiempo de servicio
(calendario), y otros requisitos de mantenimiento,
en la segunda fase se edita el
libro de la revisión mayor, en el que están
todas las operaciones necesarias para realizar
revista de aeronáutica y astronáutica / diciembre 2021
todas las inspecciones que le corresponde
a una revisión de ocho años
(8Y) y 3600 horas de vuelo (6C). Una
vez que el avión entra en el taller de
aviones, comienza el desmontaje de los
componentes que hay que revisar y las
diferentes inspecciones programadas,
se revisan todos los sistemas y partes
del avión y se procede a su reparación
o sustitución si es necesario. Se montan
todos los elementos desmontados en
condición útil y se procede a comprobar
su funcionamiento. Finalmente se
realizan las pruebas en tierra de todos
los sistemas del avión y cuando se ha
confirmado su correcto funcionamiento
se solicita a la unidad que recepcionará
el avión que realice los vuelos de prueba
necesarios para renovar su certificado
de aeronavegabilidad y volver al servicio.
Ha vivido mucho con el Aviocar. Pero hay hitos que recuerda
con especial conmoción. Entre ellos me cuenta
como acabaron los T.12 en Colombia.
En el año 2004 el Gobierno español donó al gobierno
colombiano dos aviones T.12, como ayuda humanitaria,
por lo que estos aviones debían de disponer de soportes
para sistemas de oxigeno medicinal y soportes de camillas.
Se determina que sean los aviones T.12B-41 (que
pasaría a prestar servicio en la Aviación de la Armada
de Colombia) y T.12B-19 (que pasaría a la Aviación del
Ejército de Colombia). Estos dos aviones, con el apoyo
de MAESMA, el Ala 46 de Gando, personal militar de la
Aviación de la Armada y de la Aviación del Ejército de
Colombia, se embarcaron en un navío de la Armada de
Colombia que llego al arsenal de la Armada en Las Palmas
de Gran Canaria. Personal del Ala 46 formó a los pilo-
Aviones rumbo a Colombia en barco
Montaje de los aviones en Colombia