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SECCIONES - OBSERVATORIO INTERNACIONAL
EL CONTAGIO GOLPISTA: UN MAL AUGURIO
PARA ÁFRICA OCCIDENTAL
Alberto Pérez Moreno
Coronel de Infantería DEM retirado
El golpe de Estado en Burkina Faso y
el intento en Guinea-Bissáu llevado a
cabo una semana después, el cuarto
tras las acciones golpistas en Mali,
Guinea-Conakri y Chad de los últimos
18 meses, han puesto de manifiesto la
persistencia y efectos perniciosos de
las acciones del yihadismo que han
aumentado un 70 % en el Sahel, y un
50 % en Burkina Faso, según el Centro
82 / Revista Ejército n.º 971 • marzo 2022
de Estudios Estratégicos de África
(ACSS). Pero el aumento de golpes de
Estado también es consecuencia del
mal gobierno que impera en la región,
como apunta Paul Kagane1. Además,
tanto el G5 Sahel, como la Comunidad
Económica de Estados del África Occidental
(ECOWAS) y la Unión Africana,
(UA) se muestran ineficaces para
responder a estos golpes, y aunque la
ONU y la Unión Europea (UA) también
están presentes, pero de forma restringida,
Francia es cada vez más impopular,
y Rusia trata de ganar amigos
vendiendo servicios de seguridad2.
GOLPE DE ESTADO EN
BURKINA FASO Y SUS
MOTIVOS
Seis años después de su elección, el
presidente Roch Marc Christian Kaboré
era derrocado el 24 de enero
tras dos días de violentas manifestaciones
en la capital, Uagadugú y en
Bobo Dioulasso, disparos en los cuarteles
de la capital y en los campamentos
de Sangoule Lamizana y Baba Sy,
al igual que en las ciudades de Kaya y
Ouahigouya en el norte, unos hechos
que aumentaron el temor a una mayor
inestabilidad en el pais3.
Cuidadosamente planificado, el golpe
ha sido obra de jóvenes oficiales al
mando del teniente coronel Paul-Henri
Sandaogo Damiba, actual mando
de la 3ª Región Militar, la mayor de
Burkina Faso, y ex miembro del Rgto
de la Guardia Presidencial4. Más tarde
la televisión informaba del nombramiento
de Damiba como presidente y
jefe de las fuerzas armadas, y en una
declaración hecha en nombre del Movimiento
Patriótico de Salvaguardia y
Restauración (MPSR en sus siglas en
francés), órgano ejecutivo de la junta
gobernante, se expresaba el deseo
de «respetar los compromisos adquiridos
» y el retorno a los derechos humanos
en un «plazo razonable»5.
La reacción internacional no se ha
hecho esperar y el secretario general
de la ONU, Antonio Guterres, advertía:
«condeno enérgicamente todo intento
de tomar el poder por la fuerza
de las armas», y el portavoz del Departamento
de Estado norteamericano,
Ned Price, «instaba a los oficiales
a dar un paso atrás y abordar sus
Burkina Faso. El portavoz del MPSR anuncia que el ejército controla el país