revista de aeronáutica y astronáutica / junio 2021
dosier 479
Hace ya 47 años, el 18 de diciembre de 1973, aterrizaba a las 08:50 horas en la base aérea de Zaragoza procedente
de EE.UU, el primer Hércules del EA, T.10-01, transportando a bordo a un escogido grupo de oficiales y suboficiales
que habían realizado los cursos de especialización en la factoría Lockheed. El acto de bienvenida fue presidido por el
general Retuerto Martín, jefe de la Aviación de Transporte, acompañado del teniente coronel García Matres, primer jefe
del 301 Escuadrón, y por el personal del mismo.
El teniente coronel José García Matres supo establecer adecuadamente los cimientos de esta unidad, que no se convertiría
en Ala 31 hasta 1978, tras varias adaptaciones orgánicas, y que con el paso de los años se ganó el prestigio y
respeto en todo el mundo, constituyendo una referencia para la aviación de transporte del Ejército del Aire.
Muy ligada a Zaragoza, la unidad recibió en diciembre de 1979 su estandarte, donado por la ciudad y entregado en
un solemne acto.
Muchas son las misiones que se han realizado en todo este tiempo y de diferentes tipos: ayuda humanitaria, apoyo
a catástrofes, repatriaciones, apoyos a operaciones en el exterior, lanzamientos, reabastecimientos en vuelo, etc., a
pesar del reducido número de aviones en dotación (solo 12), limitada plantilla, así como una única base de operación,
Zaragoza. Hay todavía muchas personas que piensan que se disponía de una flota sensiblemente mayor, repartida por
diferentes localizaciones de nuestra geografía, y con capacidad para atender a todas las necesidades nacionales y compromisos
internacionales en apoyo al exterior.
La clave del éxito es sencilla; continuo trabajo, vocación de servicio, alta dedicación y muchísimo esfuerzo de todo el
personal durante años, que sumado a las excelentes capacidades del avión, alta sostenibilidad y fiabilidad de la plataforma,
así como gran seguridad para su operación, han permitido cumplir siempre con lo ordenado y estar donde ha
sido necesario.
Me vienen a la memoria muchos recuerdos inolvidables del Hércules en los más de 16 años que he pasado en este
ala, pero quizás remarcaría la oportunidad que nos han ofrecido los T.10 de conocernos entre nosotros y confiar plenamente
en el trabajo de cada uno. Hemos creado una gran familia Dumbo, que durante el mucho tiempo fuera de casa
y altísima dedicación que esta unidad exige, siempre hemos encontrado ánimos y aliento de algún compañero para
continuar adelante.
Con la baja de los Hércules el 31 de diciembre de 2020, el Ala 31 continua su adaptación a la nueva plataforma aérea,
el A400M/T.23, proceso ya comenzado hace cuatro años tras la llegada del primer avión, y que gracias a mis predecesores,
así como al continuado esfuerzo de nuestros mandos, el camino esta adecuadamente orientado y en marcha.
Por lo que afrontamos con gran ilusión y confianza esta nueva etapa, donde obtendremos con el tiempo el máximo
rendimiento del nuevo Dumbo, en el que el Ejército del Aire y las Fuerzas Armadas han depositado grandes esperanzas.
Asimismo, quiero dedicar un recuerdo especial a los compañeros del Ala que ya no están entre nosotros. Unos porque
dieron su vida por la unidad y por España, otros porque les llegó su hora. Aunque tengo la plena seguridad que…
desde donde están, nos contemplan y velan por el Ala 31, ya que son parte de la historia de esta unidad y a los que
nunca olvidaremos.
Por último agradecer a la Revista de Aeronáutica y Astronáutica la oportunidad brindada de incluir en este número
un dosier del T.10 Hércules, donde hemos seleccionado únicamente, ante la limitación de espacio, algunos episodios
o misiones de estos años para recordar parte de esos momentos vividos con esta plataforma y honrar su memoria.
Adelantar a los lectores que el Ala tiene el proyecto de completar el libro del XXV aniversario, con un segundo volumen
que abarque hasta su baja del servicio, donde sí podamos reflejar la mayor parte de los acontecimientos en los que la
unidad ha estado implicada los últimos 22 años.
Juan Domínguez Pérez
Coronel del Ejército del Aire
Jefe del Ala 31
Adiós
a los Hércules